Esta semana os daré das recetas muy manchegas y típicas en estas fechas. Tanto las hojuelas como las flores de Calatrava son repostería de Semana Santa y supongo que muchas madres ya estarán preparando para hacerlas. Por eso esta vez me he querido adelantar para animaros a hacerlas ya que en ninguna casa de la Mancha pueden faltar en estas fechas estos dulces.
Dice el refrán que cada maestrillo tiene su librillo y yo, como siempre, os doy mi receta particular aprendida de mi madre, con algún toque mío. En la cocina, como en cualquier otra disciplina, la ortodoxia está bastante reñida con la evolución. Si los cocineros no aportáramos a las recetas clásicas nuestro granito de arena aún estaríamos comiendo carne de bisonte asado en la lumbre.
HOJUELAS
Ingredientes:
3 huevos – 4 cucharadas de azúcar – 1 vasito de aceite de oliva – 1 vasito de vino rancio, oloroso, o brandy – el zumo de dos naranjas – la ralladura de un limón – 1 sobre de levadura o un papelillo de gaseosa casera – 500 grs. de harina aprox.
Elaboración:
En un bol se mezclan los huevos con el aceite, el azúcar, el vino, el zumo y la ralladura de limón. A continuación se bate todo con una varilla. Si os queréis entretener en montar las claras a punto de nieve aparte y añadirlas poco a poco al resto, tened por seguro que quedarán unas hojuelas exquisitas.
Luego se va añadiendo la harina con la levadura mezclada hasta que la masa coja una textura lo suficientemente consistente como para que no se pegue en las manos ni en la mesa. Tapar la mezcla y reposarla 15 minutos.
Si se tiene una encimera de mármol o granito espolvorear un poco de harina sobre ella, si no sobre una mesa bien lisa. Coger bolas de masa e ir extendiéndolas con un rodillo enharinado para evitar que se pegue. Debe quedar una masa muy, muy fina.
A continuación ir cortando la masa en cuadraditos o rombos de unos 7-8 cmts. De lado con un cortapizzas o un cuchillo. Luego con la punta de un cuchillo hacer varias incisiones en los cuadraditos.
A continuación ir echando una a una las hojuelas en una sartén con abundante aceite de oliva a fuego mediano, procurando que no se toquen entre ellas
Conforme vayan estando hechas, se apartan en una fuente con papel absorbente, y después se van rebozando en una mezcla de azúcar y canela en polvo.
El secreto de las hojuelas está en hacerlas muy finas, tan finas como un papel, y en batir bien la mezcla (espumar) antes de añadir la harina. Eso hará que las hojuelas estén muy crujientes y que se deshagan en la boca.
FLORES DE CALATRAVA
Ingredientes:
2 huevos – ½ litro de leche – la ralladura de una naranja – 1 copita de brandy o cualquier otro licor – 3 cucharadas de azúcar – 200 grs. de harina.
Elaboración:
En un bol se mezclan todos los ingredientes menos la harina. Se baten bien con una varilla y a continuación se le va añadiendo la harina poco a poco hasta dejar una consistencia de crema ligera.
Se pone abundante aceite de oliva a freír y con un molde de hierro de flor se hace la siguiente operación: se mete primero el molde en el aceite y a continuación se mete en la mezcla.
Luego se saca empapado de la mezcla y se mete en la sartén con el aceite caliente.
La flor se desprenderá ella sola dentro de la sartén
Luego se van sacando sobre papel absorbente y, al igual que las hojuelas, se rebozan en una mezcla de azúcar y canela molida.
Se conocen como flores de Calatrava porque el molde tenía la forma de la Cruz de calatrava. Aunque no se sabe a ciencia cierta si este dulce se creó dentro de la Orden del mismo nombre, si puedo asegurar que es un dulce de la Mancha y del Campo de Calatrava. Lo cierto es que en muchos otros lugares, como el resto de Castilla, se utilizan otros moldes con distintas formas de flores. Los moldes pasaban de madres a hijas al igual que la receta.
La tradición en muchos lugares es de comerlas en Carnaval, y las hojuelas en Semana Santa, pero en otros muchos se combinan, ya que se aprovecha el aceite y el azúcar con la canela para hacerlas a la vez.
Quiero aprovechar para rendir un homenaje a mi madre, de la que tanto he aprendido, y a toda su sabiduría culinaria.
BON APETIT!