Ésta semana vamos a hacer dos recetas sencillas. La primera es con la intención de aprovechar los últimos días de la época de pesca del cangrejo y viene a colación por el artículo de mi blog publicado en éste mismo sitio titulado: “Especies invasoras”, la segunda es una receta que forma parte de la receta que daré la próxima semana es también para aprovechar lo que queda del mes de Septiembre que junto con Julio y Agosto son los mejores para las sardinas.
CANGREJOS DE RIO EN SALSA
INGREDIENTES:
- 2 kg. de cangrejos de rio
- 2 cebollas medianas
- 1 kg de tomate frito
- 4 dientes de ajo
- 1 vaso de vino blanco
- 1 cucharada de pimentón de la vera
- 8 granos de pimienta
- 1 guindilla
- 2 hojas de laurel
- 120 ml. de aceite
Capar los cangrejos y dejarlos en agua 2 horas. Picar la cebolla y el ajo muy menudo. En una cacerola poner el aceite a calentar y añadir el ajo y la cebolla, rehogarlos a fuego medio 6 ó 7 minutos.
Añadir los cangrejos, rehogar y añadir el laurel, la guindilla y la pimienta. Añadir el pimentón y rehogar medio minuto, añadir el vino blanco, dejar unos 6 minutos para que se evapore el alcohol y añadir el tomate frito, dejar tres minutos para que reduzca y retirar del fuego.
Este plato está muy bueno frío, al día siguiente de cocinarlo.
Aunque sean cangrejos, y por tanto marisco, a esta receta le va muy bien un tinto joven tempranillo-merlot o un tinto crianza de tempranillo.
SARDINAS AHUMADAS
INGRDIENTES
- 1 Kg de sardinas medianas (mejor del Atlántico o el Cantábrico)
- 1 kg de sal Maldon ahumada
- 150 cl. de aceite de oliva virgen extra
Se limpian muy bien las sardinas y se separan los dos lomos quitándoles las espinas de la zona ventral.
En un recipiente cuadrado o rectangular un poco profundo (por ejemplo un tupper) se pone en la base una capa de sal ahumada. A continuación se coloca una capa de filetes encima con la parte de fuera hacia abajo. Se cubre con otra capa de sal, y a continuación se hace otra capa de filetes, y así hasta que se acaben, cubriendo la última capa de filetes con la sal. Se tapan y se dejan 48 horas en un sitio más bien fresco.
A las 48 horas se van sacando los filetes de sardinas y se van lavando en el grifo, en esta operación se desprenderá la piel de las sardinas. Escurrirlas y secarlas bien y colocarlas en otro recipiente parecido por capas cruzadas. Cubrirlas de aceite y ya están listas para consumir.
Esta receta aparte de fácil tiene muchas posibilidades: para acompañar ensaladas, con queso fresco o en tosta con crema de queso, con puré de pimientos de piquillo, con tapenade de anchoas o con guacamole. La próxima semana os haré un plato que va genial con las sardinas ahumadas.
Acompañar con un vino blanco de la ribera del Rhin, Txacolí, o un blanco de la tierra de uva macabeo. También le van los rosados y algún tinto joven. El sauvignon blanc es para mí quizá el mejor vino para acompañar esto.
Bon apetit!