El lunes siguiente a San Antón, la Virgen de Peñarroya, patrona de La Solana y Argamasilla de Alba, es trasladada desde la localidad de La Solana hasta su santuario en el Castillo de Peñarroya, siempre que la festividad no coincida con el domingo, de ser así, se trasladaría al segundo lunes.
La alcaldesa, Sonia González, y la concejala de Promoción Económica, Agricultura, Ganadería y Medioambiente, Pilar Mateos, estuvieron presentes para recibir a la Virgen y acompañar a los vecinos y vecinas que esperaban con emoción la llegada de la imagen.
El sol y una temperatura agradable acompañaron a los numerosos argamasilleros y argamasilleras que esperaban en el cruce de las carreteras de La Solana (CM-3109) con la de Argamasilla de Alba a Ruidera (CM-3115) para ver a su patrona. A la llegada al punto de encuentro, la imagen fue descubierta por los representantes de la hermandad de La Solana. En ese momento, el párroco local, Ángel Moreno, compartió una breve oración con los presentes, entre los que también se encontraba el hermano mayor de la Virgen de Argamasilla de Alba, Cristóbal Jiménez.
Destacar que previamente a este encuentro, la imagen hizo parada en la finca Las Pachecas donde a las 12.00 h. se rezó el Ángelus y lo asistentes pudieron tomar un aperitivo.
Salir y esperar para ver la imagen en su traslado es una muestra de la gran veneración y devoción que los vecinos de Argamasilla de Alba tienen por la Virgen de Peñarroya. Este encuentro, a pesar de su brevedad, apenas 15 minutos, se convierte en un momento intenso de homenaje a la patrona. Tras este momento de reflexión, la imagen continuó su camino hasta el santuario, donde permanecerá hasta el último domingo de abril. En esa fecha, el pueblo de Argamasilla de Alba celebra una romería para llevar la imagen a pie desde el santuario hasta la localidad.
El encuentro con la Virgen de Peñarroya es un evento que une a los vecinos de Argamasilla de Alba en un acto de fe y devoción, demostrando su profundo amor y respeto por la patrona. Este año, el encuentro fue favorecido por un radiante sol que aportó calidez al evento, en contraste con el frío de los últimos años.
