El pasado 16 de junio, se celebraba en la localidad coruñesa de As Pontes el NorthWest Triman, una de las pruebas distancia Ironman que se disputan en España. Celestino Pedro y José Eugenio Ortiz, integrantes del Atlético Tomelloso Triatlón, participaron en la misma, cuya localidad albergaba los circuitos de natación de 3.8 km en su lago artificial, de ciclismo con sus 180 km con 4 vueltas alrededor de la localidad, y la carrera a pie con otras 4 vueltas para recorrer los 42km finales.
Unos 350 triatletas se daban cita en la mañana del domingo bajo un intenso frío y una espesa niebla que obligó a los jueces -tras un retraso en el horario de salida- a suspender definitivamente el sector de natación. Una vez cambiado el sector por 8km de carrera a pie, los corredores tomelloseros decidieron hacerlo juntos hasta llegar a T1.
En mitad de la clasificación, se encontraron ambos al salir de boxes con la bicicleta, donde cada uno impondrían sus ritmos al estar prohibido el drafting (ir a rueda). Pronto empezaron a remontar posiciones los tomelloseros, bajándose el primero de ellos José Eugenio en 19° puesto. Por su parte, Celestino también había recuperado ya hasta el puesto 50 en T2.
La carrera a pie final es la que marca definitivamente la diferencia en este tipo de pruebas por todo el cansancio acumulado, en la que los deportistas tuvieron suerte dispar: Ortiz llegó a remontar hasta el puesto 15°, pero sobre el km 19 empezó a decaer al tener problemas intestinales y de deshidratación, no pudiendo ingerir nada prácticamente desde el kilómetro 25. Esto supuso un auténtico calvario, como así relató, hasta llegar a meta en el puesto 56°. Por otro lado, Pedroche comenzó una remontada espectacular marcando el undécimo parcial final que le colocaba en el 16°, lugar en el que se mantuvo al final, demostrando ser un auténtico ‘hombre de hierro’.
Ser finishers en este tipo de pruebas ya es una auténtica proeza, puesto que de los 350 participantes totales consiguieron acabar 220. Celestino invirtió un tiempo de 9 horas y 35 minutos, mientras que José Eugenio tardó 10 horas y 10 minutos.
