Castilla-La Mancha ha perdido un 25 por ciento de examinadores desde 2007, lo que, a juicio de CSIF, está poniendo «en grave riesgo» la continuidad de los servicios públicos de exámenes de la Dirección General de Tráfico.
En nota de prensa, el sindicato apunta que la provincia de Ciudad Real ha sufrido la mayor bajada de número de examinadores, ya que ha pasado de 9 a 5 profesionales en los últimos diez años; Cuenca cuenta con 3 examinadores (ha perdido uno); Guadalajara también tiene 3 examinadores (ha perdido 2); Toledo cuenta con 8 examinadores (ha perdido 2) y Albacete es la única provincia en la que no ha disminuido la plantilla (9 examinadores). En total, la región cuenta en la actualidad con 28 examinadores, 9 menos que en 2007.
Precisamente, la Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra) ha convocado una jornada de paro en toda España para este viernes, con el apoyo de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), debido «a la asfixiante» falta de personal que padece este colectivo.
Según el sindicato, «a las deficiencias en las plantillas se suma el aumento de los procesos de examen durante el periodo estival». Asimismo, asegura, «el colectivo corre el riesgo de ver más mermada aún su capacidad debido a las próximas jubilaciones de algunos de estos trabajadores».
Además, indica que dos años después de la huelga de otoño de 2015 continúa sin abordarse el aumento de la plantillas, así como los contenidos retributivos ni las medidas de seguridad que reclama este colectivo. Es por ello que CSIF reclama que se destinen más recursos para evitar el colapso en la obtención del permiso de conducir.
