La Comisión Europea ha anunciado este jueves que elevará los anticipos de los fondos de la Política Agrícola Común (PAC) hasta el 70% en el caso de los pagos directos y hasta el 85% en el de las ayudas para desarrollo rural con el objetivo de mejorar la situación de liquidez de los productores europeos en el contexto de la crisis causada por la pandemia de COVID-19.
De esta forma, se incrementa en quince puntos porcentuales los anticipos permitidos en el pilar I (ayudas directas), desde el 50% anterior, y en diez puntos los fondos de desarrollo rural, con respecto al 75% previsto hasta ahora.
En un comunicado, Bruselas ha explicado que los agricultores y ganaderos de la UE podrán empezar a recibir estos adelantos a partir de mediados de octubre. Además, los Estados miembros podrán hacer los pagos antes de finalizar los controles sobre el terreno.
Aparte de elevar los niveles de los anticipos de la PAC, el Ejecutivo ha aprobado una segunda medida que reducirá el número de controles físicos en un momento en el que es «crucial» minimizar los contactos entre productores en inspectores.
Asimismo, los países podrán utilizar «fuentes alternativas» de información que sustituyan las visitas a las granjas pro parte de inspectores. Las autoridades europeas también instan a reforzar el uso de nuevas tecnologías para comprobar que se realizan las inversiones comprometidas.
«Esta medida ayudará a reducir la carga administrativa y evitará retrasos innecesarios en el procesamiento de las solicitudes de ayudas para garantizar que ser realizan los pagos en el menor periodo de tiempo posible», ha destacado el Ejecutivo comunitario.
