El pasado viernes 3 de octubre, el IES Airén de Tomelloso despidió con emoción a Pablo Cepeda, orientador del centro durante casi tres décadas, que se jubila dejando una profunda huella en el instituto y en toda la comunidad educativa de la comarca.
Durante más de 28 años, Pablo ha sido mucho más que un orientador académico. Su labor, marcada por la sencillez, el humor y una implicación constante, ha convertido su figura en un referente de apoyo y acompañamiento tanto para el alumnado como para las familias y el profesorado. “Generaciones de alumnos, familias y profesores han encontrado en él un apoyo cercano, un consejo sabio y una sonrisa en los momentos difíciles”, señalaron desde el centro.
A la despedida se sumó también el director del IES Airén, José Antonio Espinosa, quien quiso destacar públicamente la impronta que deja Pablo en el instituto. “Gracias por tu sencillez, prudencia y tu constante implicación. Has sido ejemplo de dedicación, compañerismo y, sobre todo, de profesionalidad”, escribió en redes sociales.
Espinosa reconoció el papel fundamental que ha desempeñado Pablo en la gestión y el día a día del centro: “Más que un compañero, para mí has sido otro miembro fundamental de este equipo directivo, dejando en el Airén una huella imborrable”. En su mensaje, también puso en valor su capacidad para unir a toda la comunidad educativa: “Este centro es parte de ti y se debe en gran medida a tu labor como aglutinante perfecto entre alumnado, familias y profesorado”.
El acto de despedida, celebrado en el propio centro, fue un momento de reconocimiento de toda la comunidad educativa a una figura muy querida y respetada. Todos han coincidido en destacar su vocación, su cercanía y su papel como pilar del instituto a lo largo de los años.
“Te deseamos todo lo mejor en esta nueva etapa, que seguro vivirás con la misma pasión que nos has regalado todos estos años”, fue el mensaje unánime que cerró un homenaje tan sentido como merecido.
