La Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha ha activado el Centro de Coordinación Regional (CECOR), que presidido por el delegado del Gobierno, Francisco Tierraseca, establecerá los dispositivos operativos necesarios para garantizar tanto el cumplimiento del toque de queda como el cierre perimetral de la región, a fin de impedir entradas y salidas injustificadas.
Preguntado por esta cuestión, durante la rueda de prensa que ha ofrecido tras presidir la reunión con los responsables de la Unidad contra la Violencia sobre la Mujer, Tierraseca ha insistido en que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado trabajarán por el cumplimiento de las medidas decretadas por el Gobierno regional, que establece, entre otras, el cierre perimetral, en un principio, hasta el próximo 9 de noviembre y las restricciones de movilidad nocturna entre las 00.00 y las 6.00 horas.
De igual modo, Tierraseca, tras asegurar que desde el pasado domingo se decretase el estado de alarma ha habido mayor presencia de efectivos de la Policía Nacional y de la Guardia Civil en los pueblos y ciudades de la región, ha recordado la reunión que esta semana ha mantenido con el presidente regional, Emiliano García-Page «con el fin de intercambiar impresiones y datos y de reforzar la coordinación, que no ha dejado de existir desde el pasado 14 de marzo», cuando se decretará el primer estado de alarma.
«Además, en la reunión de activación de CECOR con los mandos de Castilla-La Mancha y de la provincia de Toledo de Policía Nacional y de Guardia Civil diseñamos el dispositivo a desplegar desde el primer minuto a declarar el cierre perimetral», ha añadido.
«Está todo preparado para evitar salidas y entradas de la región, siempre y cuando no sean por un motivo justificado», ha insistido Tierraseca, que ha defendido que dentro de este dispositivo se ha intensificado el control con las provincias limítrofes de Madrid, sobre todo en Toledo y Guadalajara.
De igual modo, se ha potenciado la coordinación con las comandancias de la Guardia Civil de Valencia, Extremadura y Andalucía para coordinar controles en cierre perimetral, según ha indicado.
«Castilla-La Mancha acoge cuatro de los seis ejes básicos que salen de Madrid a otras regiones como son la A-2, la A-3-, la A-5 y la A-5», ha precisado el representante del Ejecutivo central en la región, que ha apostillado que los efectivos de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, además de vigilar dichas vías de comunicación, estarán presentes en ciudades y pueblos de la geografía regional para «poder atajar y sancionar posibles botellones o actividades» que ejecutan «una minoría de insolidarios que ponen en peligro la salud pública» y que serán sancionados.
