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viernes, 20 diciembre
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El ciclista tomellosero Antonio Sevilla, tercero en la prueba Menasalbas-Montes de Toledo

La Marcha Ciclodeportiva Fondo y Gran Fondo Menasalbas-Montes de Toledo organizada por el Club Ciclista Los Indianas se consolidaba en el calendario nacional del cicloturismo con sólo tres ediciones a sus espaldas tras acoger la pasada semana a seiscientos ciclistas llegados de toda España. Un éxito de convocatoria que viene avalado por el gran trabajo realizado desde el Club Ciclista Los Indianas, organizador del evento, con la única pretensión de conseguir la diversión del ciclista bajo unos parámetros máximos de seguridad, y donde la única competición premiada se encuentra en la cronoescalada del Puerto del Robledillo.

La cita con esta completa fiesta del ciclismo arrancaba con el homenaje a título póstumo a María Paz Arraiza, Presidenta del Club Ciclista Majadahonda, muy vinculada a la familia ciclista de la Menasalbas-Montes de Toledo. Por delante, los espectaculares parajes de los Montes de Toledo en dos recorridos diferenciados: 107 kilómetros para la prueba de Fondo con 1600 metros de desnivel y 160 kilómetros para la prueba de Gran Fondo con 2300 metros de desnivel.

Oscar González se imponía por un minuto en la cronoescalada al Robledillo, por delante de José Antonio Aparicio y Jaime Ortega. El mismo Oscar González sería el primero en cruzar la línea de meta de Menasalbas tras recorrer los 160 kilómetros de la prueba de Gran Fondo, seguido de Jaime Ortega y de Carlos Alberto Sendin (Bicicletas Maroto).

En la prueba de Fondo, el mejor en la cronoescalada sería el M30 Gerardo Castro (Asnobike), que marcó más de un minuto de ventaja sobre el M50 Luciano Barquín (Ozono) y más de dos sobre Antonio Sevilla (CC Tomelloso). La llegada a meta estuvo encabezada por Gerardo Castro, Luciano Barquin y José Pablo Sanchez (Francisco Pizarro).

La organización premiaba el mejor tiempo de crono con trofeo, jamón y vino de Dehesa del Carrizal, así como a los mejores de cada categoría, además de repartir numerosos obsequios entre los participantes. “No premiamos el tiempo en la general porque nuestra marcha no es una competición pura; es una fiesta del ciclismo organizado para que todos terminemos con el mejor sabor de boca. El verdadero incentivo debe ser el hecho de disfrutar de un fin de semana fantástico en compañía de un montón de gente que ama nuestro deporte.”

Entre los participantes destacó la presencia de dos handbikes, abriendo este tipo de pruebas cicloturistas a todas las categorías, incluido el ciclismo adaptado, y contando con el soporte técnico en carrera de vehículos de seguridad.

Destacar además la ausencia total de incidentes en una prueba en la que la seguridad se había preparado con especial atención, contando con UVI Móvil y dos Ambulancias de Soporte Vital Básico, dos puntos sanitarios en los altos de los Puertos de Montaña y, como gran novedad, una Moto de Asistencia Sanitaria.

Desde la organización se ha puesto en valor el gran despliegue realizado por la Guardia Civil de tráfico y el trabajo de casi doscientos colaboradores que han controlado cada cruce y cada calle del recorrido diseñado a través de espectaculares parajes naturales y poblaciones de las provincias de Toledo y Ciudad Real: Menasalbas, Ventas con Peña Aguilera, Cuerva, San Martín de Montalbán, Villarejo de Montalbán, San Martín de Pusa, Los Navalmorales, Navas de Estena, Retuerta del Bullaque o San Pablo de los Montes (a través de los Baños del Robledillo).

Al finalizar la Marcha, los ciclistas tuvieron a su disposición a ocho fisioterapeutas y todos los participantes disfrutaron de la pericia de un cortador de jamón y de más de 400 kilos de carne de ternera de la zona que sirvió de base a una gran caldereta. También los niños pudieron disfrutar de actividades lúdicas durante el transcurso de la carrera.

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