Los afiliados de Ciudadanos escogerán en febrero y marzo a los candidatos a presidentes autonómicos y a los aspirantes a las Alcaldías de Madrid, Zaragoza, Valencia y Murcia, mientras que el resto de los candidatos que irán en las listas de las elecciones municipales y autonómicas de mayo los decidirá el aparato del partido.
Los Estatutos de Cs solo exigen la celebración de primarias en aquellas circunscripciones que cuentan con al menos 400 afiliados. Puesto que actualmente esa cifra solo se alcanza en esos cuatro municipios, serán los únicos donde la militancia podrá decidir quiénes aspirarán a las respectivas Alcaldías.
En Barcelona, donde la formación naranja apoyará como alcaldable al ex primer ministro francés Manuel Valls, no habrá primarias porque el partido se presenta a los comicios dentro de una coalición electoral.
Donde sí se celebrarán primarias independientemente del número de afiliados que haya es en las trece comunidades autónomas donde habrá comicios en mayo: Asturias, Cantabria, Aragón, La Rioja, Comunidad Valenciana, Madrid, Extremadura, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Baleares, Canarias, Murcia y Navarra.
EL APARATO DEL PARTIDO ELEGIRÁ AL RESTO DE CANDIDATOS
Para determinar quiénes serán los cabezas de lista en el resto de municipios y para rellenar las candidaturas municipales y autonómicas a partir del segundo puesto, el Comité Autonómico que corresponda hará una propuesta al Comité Ejecutivo nacional, que tomará la decisión definitiva. Los primeros puestos de las candidaturas se irán conociendo entre marzo y abril.
Esto contrasta con la situación de 2015, cuando Ciudadanos celebró primarias en todos los lugares donde concurría a las elecciones y la militancia pudo escoger a los cinco primeros puestos de cada candidatura, ya que entonces no existían las restricciones que establecieron los Estatutos aprobados en 2017.
La propuesta de la Secretaría de Organización -que será analizada y, previsiblemente, aprobada este sábado por el Comité Ejecutivo- es que las primarias para las municipales y las autonómicas tengan lugar durante la segunda quincena de febrero y la primera semana de marzo.
LAS PRIMARIAS PARA LAS EUROPEAS, LA PRÓXIMA SEMANA
En cuanto a los comicios europeos, que también se celebran en mayo, el proceso de primarias se desarrollaría desde el próximo domingo hasta el viernes, y los candidatos contarían con tres días (del lunes al miércoles) para hacer campaña.
En este caso se prevén primarias porque la circunscripción es nacional y, por tanto, hay más de 400 afiliados (actualmente son unos 33.000, aunque la cifra del censo definitivo será algo menor). Pero la votación no será necesaria si solo se presenta un candidato, y por ahora el único que lo ha anunciado es Luis Garicano, responsable económico del partido.
Quienes tienen derecho a presentarse como candidatos son los afiliados con al menos nueve meses de antigüedad en el partido, mientras que para votar se exigen al menos seis meses de militancia, y todos ellos deben estar al corriente de pago de las cuotas.
También podrán presentarse personas que no militan en Cs siempre que lo autorice el Consejo General del partido, que este mismo viernes ha aprobado la participación de Juan Vázquez en Asturias y Daniel Pérez en Aragón.
LOS CANDIDATOS COMPITEN EN «IGUALDAD DE CONDICIONES»
Aquellos que concurran a las primarias para las elecciones autonómicas o municipales dispondrán, en principio, de siete días para hacer campaña, un plazo que la dirección de Ciudadanos considera suficiente para garantizar que los afiliados pueden conocer las distintas opciones disponibles.
Además, asegura que todos los candidatos compiten en «igualdad de condiciones» porque pueden exponer sus propuestas en la web oficial y utilizar medios del partido para ofrecer ruedas de prensa. Lo que no ven necesario es organizar debates, ya que se supone que todos los candidatos defienden «un mismo proyecto, el del partido».
En cuanto a la votación, se realiza de manera telemática. Según la dirección de Cs, el proceso es «garantista, seguro y transparente» porque cada voto es sellado por la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, que emite un código a través del cual cada militante puede ver que su voto ha quedado registrado.
