La estabilidad de esta semana continuará el último fin de semana del año, así como las nieblas, mientras que el inicio de 2019 estará marcado por un descenso de las temperaturas según ha indicado el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Rubén del Campo.
Así, el tiempo de los próximos días estará condicionado por la presencia de altas presiones sobre Europa occidental, con tiempo estable y sin precipitaciones en casi toda España.
Durante el fin de semana, predominarán los cielos poco nubosos o despejados en la mayor parte del país, salvo en el sureste peninsular y entorno del Estrecho, donde estará nuboso con precipitaciones, que serán más probables y abundantes en el área del Estrecho y en el litoral de Almería.
Habrá también intervalos nubosos en el Cantábrico, Baleares y norte de Canarias, y algunas nubes bajas matinales o nieblas en el entorno del Ebro y meseta norte.
Las temperaturas diurnas subirán en áreas del norte de la Península, con heladas débiles en ambas mesetas y áreas de montaña, más intensas en Pirineos.
Predominará el viento de componente este, que soplará fuerte desde la tarde del sábado en el litoral de Alborán y área del Estrecho.
Por días, el portavoz ha indicado que este sábado 29 de diciembre estará marcado por el fuerte viento fuerte al final de la jornada en el Estrecho, así como por las nieblas localmente persistentes en las depresiones del noreste peninsular.
En cuanto a las temperaturas, ha señalado que las diurnas estarán por encima de lo habitual para esta época del año y que habrá heladas débiles en el norte de Aragón y de Cataluña, zonas de ambas mesetas y de montaña, más intensas en Pirineos.
El domingo 30 de diciembre el día será similar, con nieblas localmente persistentes en depresiones del noreste y rachas de viento muy fuertes en el entorno del Estrecho.
Las temperaturas no variarán demasiado.
El último día del año continuará la tónica de estos días y Del Campo ha precisado que la Nochevieja será «fría pero sin exagerar», sin olvidar la presencia de las nieblas, que pueden «dificultar algo la visibilidad».
El primer día de 2019 traerá un descenso paulatino de las temperaturas, tanto diurnas como nocturnas, como ha detallado Del Campo que ha añadido que estos primeros días de enero estarán marcados las altas presiones y la estabilidad, con predominio de cielos poco nubosos en prácticamente toda España aunque en el Cantábrico oriental podría estar nuboso con lluvias débiles.
También se esperan heladas en zonas de montaña y en la Meseta, que al final del periodo podrían ser localmente fuertes en Pirineos, así como la posibilidad de formación de nieblas y nubes bajas en la meseta y en valles del interior peninsular.
DESCENSO PROGRESIVO DE LAS TEMPERATURAS
En concreto, respecto a la evolución de las temperaturas, Del Campo ha señalado que, entre el sábado y el martes, en Madrid las máximas se situarán en torno a los 12 grados mientras que las mínimas rondarán los 4 y 3 grados; mientras que en Barcelona las máximas oscilarán entre los 16 y 14 grados, y los 7 o 6 de mínimas.
En el caso de Sevilla, para el mismo periodo se esperan máximas de entre 18 y 16 grados y mínimas de entre 8 y 6; en Sevilla rondarán los 10 y 8 grados de máxima, y los 8 y 6 de mínima; en Burgos habrá máximas de entre 10 y 8 grados y mínimas de 0 y hasta -2 grados; y en Gijón máximas de 13 grados y mínimas que pasarán de 8 a 2 grados.
La situación anticiclónica presenta algo de incertidumbre a partir del sábado día 5, cuando no se descarta la llegada de algún frente atlántico por el oeste peninsular por lo que no se puede descartar la llegada de precipitaciones a Península y Baleares, que serán más probables en Galicia.
