Hasta el próximo 24 de mayo se puede contemplar en la Posada de los Portales de Tomelloso la exposición de pinturas del Grupo Zarcillo de Villarrobledo. Cerca de sesenta obras, realizadas en distintas técnicas, algunas tan espectaculares como el vino tinto, el bolígrafo o los lápices de colores.
Actualmente son doce artistas los que participan en el grupo: Vicente Beneyto, Juan José F. Perona, Isabel Gualda, Javier G. Pacheco, Aurora Jareño, Sixto López, María Losa, Ceferino Martínez, Teresa Martínez, Ana Rubio Descalzo, Conchi Sánchez Caro y Paqui S. Caro. Cada uno de ellos plantea su pintura desde conceptos y técnicas diferentes; y este hecho, lejos de ser un inconveniente, es precisamente lo que enriquece al colectivo, ya que se ven obligados a un continuo diálogo que les obliga a revisar o a reafirmar sus postulados artísticos.
Cuelgan en Tomelloso sesenta obras de las más recientes. La planta baja del recurrente espacio cultural la han dedicado a temas relaciones con el vino, colocando en la primera planta obras con tema libre.
La concejala de Cultura, María Dolores Coronado ha destacado durante la inauguración el currículum de los componentes del Grupo Zarzillo. Coronado ha destacado la importancia que para Tomelloso supone esta exposición que supone un nexo de unión entre la pluralidad y el arte. No solo por la cantidad de artistas que participan, señalaba, sino por los distintos puntos de vista que confluyen. La concejala ha agradecido al Grupo Zarcillo la muestra, augurando que no será la última de este colectivo en nuestra ciudad. Ha acabado animando a los tomelloseros y visitantes a que acudan a la posada durante los días que permanezca la exposición.
Paqui S. Caro, que hizo de portavoz de esta docena de artistas nos explicaba que realizan obras conjuntas (de las cuales han traído tres a Tomelloso). Para llevarlas a cabo, eligen un tema en común, que es interpretado por cada uno de los artistas con su visión, después los montan justos, señalando que están teniendo mucho éxito. Hacen pruebas, amoldando los colores, para dale cierta coherencia a las composiciones, pero cada uno desde su estilo.
Caro ha señalado la cercanía de las dos ciudades, Tomelloso y Villarrobledo están a tiro de piedra y con la muestra quieren que aquí se les conozca , “somos un poco hermanos, en cuanto a la historia y al vino y la uva”. Los artistas quieren disfrutar de la exposición, de venir unos días a Tomelloso, ciudad que particularmente le encanta a la portavoz del grupo.
La relación de los miembros del grupo ha trascendido a lo meramente profesional, habiendo llegado a ser de amistad, o en algunos casos, como si de familiares se tratase. Los componentes pertenecen a todas las edades, desde los 84 del mayor a los treinta y pocos del benjamín.
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