La campaña del melón poco a poco se va generalizando y la próxima semana la recolección alcanzará su cénit. Tomelloso tiene la mayor cooperativa hortofrutícola de la región, Santiago Apóstol, que augura un aumento de cerca de un 20 por ciento en la producción de la pasada campaña, llegando a los 15 millones de kilos. Su presidente, José Ángel Serrano, señala la planificación como uno de los pilares para poder comercializar la ingente cosecha de melones y sandías de la cooperativa. No obstante, advierte que si la oferta se dispara, el precio se vendrá abajo
«La campaña la hemos comenzado con optimismo, pero al unir en el tiempo nuestra producción a la de otras zonas, hay más oferta que demanda por lo que los precios se están resintiendo».
Las zonas de melones y sandías que más competencia hacen a La Mancha son «Murcia y Cartagena, que planifican la plantación para que los melones sean más tardíos y se unen con nosotros al ir este año más adelantada la cosecha. Extremadura ha empezado también a recolectar y se está incorporando Valencia con sandías. Además, ha empezado a cultivar zonas nuevas, como Tarragona. Estamos cinco zonas de España recolectando ahora mismo y eso solapa mucho la producción».
Según nos cuenta el presidente de la Cooperativa Santiago Apóstol la recogida del melón se generalizará en la próxima semana «actualmente estamos en el 40 por ciento de agricultores recolectando y la próxima semana llegaremos al 80 por ciento».
Nos explicó Serrano que prevén un aumento de la producción cercana al 20 por ciento para la campaña 2015. «A pesar de que cada año se siembre más melón y sandía, nosotros estamos jugando con los kilos que tenemos vendidos gracias a la planificación. Además, este año se está consumiendo más fruta, dado el calor y ese mismo calor hace que en el campo se estropee mucho melón. Creceremos en torno al 20 por ciento más que el año pasado en que tuvimos entre 12 o 13 millones de kilos. Hablamos de 15 millones de kilos».
Las altas temperaturas favorecen el consumo y la calidad del producto pero hace que éste tenga más pérdidas. «El calor viene bien al agricultor porque hay más consumo de fruta, pero también es perjudicial. El producto va a ser bueno pero el cultivador va a tener muchas mermas por el daño de las altas temperaturas».
La planificación es uno de los pilares sobre los que se asienta la presidencia de José Ángel Serrano, así «no tendremos dificultades en darle salida a la producción. Pero si la oferta se dispara el precio se vendrá abajo y desde la cooperativa no podremos hacer mucho».
El melón que siembran y cultivan los productores de la Cooperativa Santiago Apóstol es el “piel de sapo”, algunos acogidos a la IGP “Melón de la Mancha” «algo de denota la calidad de la fruta. Soportan una serie de controles y han de cumplir unos parámetros de calidad muy exigentes, no pueden bajar, por ejemplo, de 14 grados brix, entre otras cosas».
La sandía es cada vez más demandada por el consumidor, por lo que cada vez «se dedican más hectáreas a ese cultivo. Este año en la cooperativa vamos a tener más sandías».
Sin olvidar el mercado nacional, importantísimo para la Cooperativa Santiago Apóstol, «nosotros esperamos crecer en las exportaciones. En las fechas que estamos ya hemos hecho dos contenedores destinados a Estados Unidos y estamos preparando otro. También queremos crecer en Asia, un mercado importante, muy atractivo y vamos a probar».
La Cooperativa Santiago Apóstol de Tomelloso tiene actualmente 620 socios, «hemos cambiado la tendencia, algo que me enorgullece a mi como presidente y a la junta directiva, y este año hay solicitudes de nuevos socios».
Además de melones y sandías, Santiago Apóstol comercializa cebollas y cereales «para esta cosecha tenemos previsto recoger cinco millones de kilos de cebollas».
