A finales del mes de marzo, los niños y niñas del Centro Infanto-Juvenil de Argamasilla de Alba celebraron las Semana de la Naturaleza, con motivo de la llegada de la primavera (20 de marzo), el Día Forestal Mundial (21 de marzo), el Día Mundial del Agua (22 de marzo) y el Día Meteorológico Mundial (23 de marzo).
Durante estos días, el centro organizó diferentes actividades y salidas como la realizada al parque Vicente Cano para trabajar, a través de dinámicas y juegos, la importancia de cuidar el medio ambiente y el reciclaje.
Para concienciar sobre el consumo innecesario de agua, realizaron un juego al que llamaron “¡¡Qué no se escape la gota!!”, en el que los niños y niñas realizaban cogidos de las manos un círculo, y en el centro, representando a gotas de agua, varios niños intentaban escapar del mismo. Además se hicieron actividades relacionadas con el reciclaje, como llevar ellos mismos los residuos e introducirlos en sus respectivos contenedores, comprobando “lo poco que cuesta hacerlo”, al tiempo que iban aprendiendo los grandes beneficios de este sencillo gesto.
Para celebrar el día de la meteorología elaboraron un mural en el que se representaban las estaciones del año, los meses y los días de la semana, junto a la climatología asociada con estos periodos.
En relación a la llegada de la primavera, la Ludoteca se ha decorado con motivos de esta estación, además de con un mural pintado por los usuarios con sus manos en el que pueden verse todo tipo de flores y mariposas.
Para ver y aprender el ciclo de la vida de las plantas, que en muchos casos comienza en estas fechas, los niños y niñas de la Ludoteca han sembrado lentejas en algodones, dentro de vasos decorados por ellos, que deberán cuidar, una actividad que les permitirá ver el proceso de germinación de una planta.
Con estas actividades, proyectadas de forma lúdica, se busca inculcar desde la infancia la importancia del cuidado y respeto del medio ambiente como algo cotidiano, en favor de un mundo más saludable.
Desde el Centro Infanto-Juvenil, destacan la importancia de aportar a niños y niñas, desde edades tempranas, modelos de conducta y criterios relativos a lo que está bien y mal, en este caso, en relación con la educación ambiental.
