El obispo de Ciudad Real, Gerardo Melgar, ha creado su oficina diocesana encargada de la recepción de informes relativos a conductas que podrían ser constitutivas de delitos de abusos sexuales.
Según el decreto firmado por el obispo y que ha sido enviado a los medios de comunicación, esta oficina se crea en cumplimiento del acuerdo tomado en la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española de crear este tipo de oficina y tras haberse estudiado este asunto en la reunión celebrada por los obispos de la Provincia Eclesiástica de Toledo.
El director y responsable de la misma será el vicario judicial de la Diócesis, Bernardo Torres, a quien prestarán ayuda una comisión formada a tal efecto.