El consejero de Sanidad del Gobierno de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Sanz, ha defendido la transparencia que su equipo ha tenido durante toda la crisis sanitaria en cuanto a las estadísticas de casos confirmados y fallecidos por coronavirus, al tiempo que ha cargado duramente contra aquellos «predictores del pasado» que a posteriori se han convertido en epidemiólogos.
En su intervención este jueves para cerrar un debate general en las Cortes regionales sobre la situación en la región por la crisis sanitaria, Fernández Sanz ha aprovechado para retar a la oposición a mostrar previsiones o predicciones científicas del mes de febrero e incluso de principios de marzo que de manera contrastada ya vaticinaran la virulencia del avance del COVID-19.
Ha cargado sobre las «dudas sembradas desde algunos medios y desde la política», defendiendo que las cifras que ha otorgado la Comunidad Autónoma han seguido a rajatabla las instrucciones de las autoridades sanitarias. Diariamente se han dado datos y se han ofrecido ruedas de prensa con «referencias continuas» a los casos confirmados y sospechosos, tal y como ha señalado.
Fernández Sanz ha esgrimido datos de transparencia ofrecidos por la consultora Dintra que colocan a Castilla-La Mancha en la quinta posición de todas las comunidades autónomas, aunque ha zanjado que en caso de fallecidos «no merece la pena hablar» de este tipo de rankings.
«Estoy cansado de todos los que predicen el pasado. Encuentren publicaciones científicas y serias donde algún experto previera en febrero o principios de marzo lo que iba a ocurrir. Y cuando lo encuentren y esté contrastado lo traen, pero no me valen predictores del pasado que no tienen ni idea de lo que están hablando, y lo digo con humildad, pero con profesión», ha abundado.
Sobre las críticas a la falta de material, ha recordado que han sido problemas sufridos por todos los territorios, al tiempo que ha exhibido que los primeros test rápidos comprados por la región son los que se están usando ahora a nivel nacional.
PICAZO ENUMERA ERRORES DE LA JUNTA Y LLAMA A «ARRIMAR EL HOMBRO»
La portavoz de Cs, Carmen Picazo, ha empezado su discurso apuntando que al arrancar la crisis, el presidente autonómico, Emiliano García-Page, en vez de «rodearse de expertos» se dedicó «a meterse con profesores, alumnos y personas mayores».
Los profesionales sanitarios «han estado desprotegidos, han tenido que taparse hasta con bolsas de basura», y ha habido momentos en los que «han faltado respiradores». «Querían más tapar el desastre que resolverlo».
Ha criticado que el Gobierno «ha buscado culpables en Madrid, en La Rioja o en la población envejecida», al tiempo que se mandaban mensajes de que «todo iba bien».
Por ello, ha pedido detectar «los errores» para «no volver a tenerlos en el futuro». «La situación era muy difícil, pero ustedes han estado muy por debajo de sus responsabilidades, y debemos denunciarlo por respeto a la ciudadanía». En su opinión, otras regiones «han funcionado mejor», punto en el que casualmente ha citado las gobernadas por el PP con apoyo de Cs, como Murcia, Madrid o Castilla y León.
Ahora, la postura de Cs va a ser «tender puentes» y no quedarse «de brazos cruzados», ya que así no decepciona a sus votantes. Pero ha avisado de que «los castellanomanchegos darán la espalda a los que les mienten o a las que están en la bronca permanente».
«Es la hora de arrimar el hombro para salvar empleos y vidas», ha insistido Picazo, quien se ha arrogado ser la formación impulsora «del gran acuerdo» firmado con PSOE y Gobierno este miércoles.
Tras lamentar que el PP no se haya sumado a este pacto, ha dicho a los ‘populares’ que «quien no sea parte de la solución será parte del problema».
GUARINOS: «HEMOS SIDO VÍCTIMAS DEL VIRUS Y DEL GOBIERNO»
Por parte del Partido Popular, ha sido la diputada Ana Guarinos la encargada de fijar posición del Grupo Parlamentario, comenzando su alocución mostrando su gratitud a los profesionales sanitarios que han luchado en primera línea contra el avance del coronavirus.
Aunque es verdad que la región «ha sido víctima de un maldito virus», también ha sido víctima, a su juicio, de un Gobierno «desbordado» al que «le ha faltado humanidad» y que además «ha evitado el control parlamentario, ha falseado datos, ha despreciado cualquier testimonio que no fuera la verdad oficial y ha insultado a los que lanzaban un SOS desesperado».
Para Guarinos, «se agradecería un poco más de humildad» toda vez que «ha faltado de todo y para todos», sobre todo para los sanitarios, de los que «más de 3.000 se han contagiado y 17 han fallecido», algo que «el Gobierno ha negado siempre». Cuando las urgencias se colapsaban, el Gobierno debería haber abierto el nuevo hospital de Toledo, que ha estado cerrado «en la peor crisis sanitaria y cuando más se necesitaba, con 800 camas, 80 UCIs y 25 quirófanos».
«Han acusado a médicos de mentir al denunciar falta de medios, y García-Page les animó a ir a los tribunales, algo que calificaron de inadmisible. Y el Colegio de Médicos de Guadalajara denunció la falta de medios que obligó a dejar a pacientes que luego murieron fuera de la UCI», ha añadido.
En opinión de la parlamentaria del PP, el Gobierno ha evitado culpas. Si hay más fallecidos «es por Madrid o por un señor de Tomelloso que contagió a 50.000 personas»; y la culpa de la tasa de letalidad es «de que la población es envejecida», estadísticas en las que «también mienten».
Ahora, si bien «hay que mirar al futuro», no se puede dejar de lado el pasado, ya que «existe el deber de preguntar y saber qué ha pasado para evitar que vuelva a suceder». Ha sido en este punto donde ha hecho referencia al pacto alcanzado entre PSOE y Cs, «un pacto sin presupuesto, sin participación, sin escuchar, para blanquearse». «Colaboradores sí, pero cómplices no», ha zanjado la diputada guadalajareña.
PSOE PIDE QUE LA CRISIS «NO CASTIGUE A LOS DE SIEMPRE»
El diputado del PSOE José Antonio Contreras ha defendido desde la tribuna de oradores que este país pasa «por la peor crisis de la historia» con consecuencias «inciertas», pero «castigando» a los de siempre.
Por eso, es necesario «trabajar todos juntos, sumar y proteger a la parte más débil de la sociedad», de manera «constructiva» y con lealtad pero «no al Gobierno, sino con la ciudadanía».
«Habrá tiempo de diagnosticar qué ha fallado y qué no ha fallado. No sé por qué insisten en que no se han pedido disculpas, cuando lo ha hecho el propio presidente», ha abundado Contreras, quien ha pedido que «más allá de palabras fueras de contexto» -en alusión a algunas afirmaciones de García-Page- es mejor atender a los «hechos».
En este punto, ha desvelado que ha estado afectado por coronavirus, haciendo referencia a que el domingo 8 de marzo acudió a un partido de fútbol y cogió el transporte público en Madrid. «Y nadie echa culpas a nadie de nada, solo queremos reflexionar sobre algo en concreto». Con todo, ha pedido valorar los esfuerzos del Gobierno, tanto en inversión en recursos humanos como en tecnología.
Por último, ha apelado al «consenso en el trabajo», instando al PP a trabajar a nivel regional del mismo modo que lo hace en los ayuntamientos de la región.