La Asamblea regional de Podemos Castilla-La Mancha que dirimirá el liderazgo del partido tras las votaciones que se prolongarán durante la próxima semana ha arrancado con un debate entre los tres candidatos a la Secretaría General, José García Molina –que opta a la reelección–, David Llorente y Fernando Barredo, una cita que ha estado moderada por los periodistas Javier Ruiz (Onda Cero) y Carolina Sánchez (La Tribuna).
La decisión de rechazar los presupuestos generales de la Comunidad Autónoma en el Parlamento regional el pasado mes de abril ha centrado buena parte del debate, con el actual máximo dirigente explicando que la decisión se tomó sobre todo por la no aceptación por parte del PSOE de casi la totalidad de enmiendas parciales presentadas. Así, García Molina ha recordado que si bien el Proyecto de Ley recogía el Plan Podemos de Garantías Ciudadanas con 119 millones de euros, la actitud de Gobierno y PSOE hizo que «fuera difícil apoyar la acción del Gobierno».
David Llorente, por su parte, ha afeado a García Molina que la decisión tomada «por sorpresa» causó «desconcierto» en la militancia, añadiendo que para evitar esto en el futuro propone «revisar los procedimientos de toma de decisiones». «Nosotros queremos consultar a la militancia todo, y proponemos volver a presentar nuestras enmiendas para renegociar los presupuestos».
Fernando Barredo, de su lado, ha recordado que al ser el único candidato sin cargo institucional, no ha tenido responsabilidad en esta decisión, pero ha abundado en la crítica de que la militancia se enteró «por la prensa» de esa decisión. «Creo que ha sido una maldita broma que en Podemos actuemos de esta manera. Lo lógico hubiera sido consultar, pero el Consejo Ciudadano lo dirige García Molina y sus asalariados, y así es muy difícil», ha agregado.
En el turno de réplica se ha vivido el primer momento polémico cuando García Molina ha acusado a Llorente de criticar la decisión en la prensa cuatro días después de haber sido tomada. «No vienes al Consejo Ciudadano, y sales cuatro días después en los medios, y no en los órganos del partido. ¿Que te pasó en esos cuatro días?», le ha espetado.
David Llorente, que le ha contestado que salió en prensa porque no sabía «cómo defender» el rechazo a los presupuestos, ha añadido que si ha acudido a la prensa ha sido sólo «alguna vez», momento en el que los ‘molinistas’ del auditorio han abucheado y han recibido la reprimenda de los ‘llorentistas’, quienes han pedido «respeto». Cuando Llorente ha podido retomar la palabra, ha criticado que el líder de la formación «no cumple con sus documentos». «¿Cómo vamos a pedir a Page que cumpla si Molina no cumple?», ha cuestionado.
Barredo, por su parte, ha criticado que en el partido «esté instalada la ley mordaza y la voz no llegue a los de abajo» para justificar su postura, y ha hecho un paralelismo entre el partido y «una familia donde el padre, el que manda, el fuerte, abusa de una hija», ante lo que «se abren dos posturas», ocultarlo, o denunciarlo. Ha considerado además que hubo «injerencias» de la dirección nacional del partido para tomar la decisión de rechazar las cuentas.
OTROS ASUNTOS
El debate ha continuado con la fijación de posturas de los tres candidatos sobre otros asuntos, empezando con la defensa del agua en la Comunidad Autónoma.
Sobre este asunto, David Llorente ha llamado a tener «una posición clara» y «no estar en la sombra» para poder «asegurar los usos prioritarios del agua para beber y no para campos de golf».
Fernando Barredo ha coincidido con Llorente, cerrándose en banda ante la continuidad del trasvase Tajo-Segura, lamentando que Castilla-La Mancha «haya sido tratada como una región de segunda» y abogando por «defender el agua con uñas y dientes».
De su lado, José García Molina ha rechazado el modelo hídrico nacional, pero ha abierto la puerta a la «solidaridad entre regiones» ligada a la defensa del agua, algo que ha merecido la crítica de sus dos contrincantes.
Se ha debatido además sobre la postura de los candidatos de cara a posibles alianzas, y mientras García Molina y David Llorente se han mostrado partidarios de estudiar la confluencia con otros partidos –rechazando al PSOE en todo caso– de cara a próximas citas electorales, Fernando Barredo ha utilizado su turno de palabra para seguir insistiendo en que su candidatura ha sido «ninguneada» por el aparato del partido, criticando que en tiempo real durante la cita una cuenta oficial de Twitter estaba publicando mensajes en favor de David Llorente y tachando a la candidatura de García Molina de estar «patrocinada» por el partido.
MODELO INTERNO
Sobre la estructura interna de partido, García Molina ha apostado por dar protagonismo a los círculos pero no acabar la acción política en ellos. «Tenemos que desbordarnos y esto pasa también por los lugares de trabajo y por las calles», ha defendido, apuntalando su idea de que «las cosas importantes las tiene que decidir la gente de Podemos».
Barredo ha replicado diciendo al actual líder del partido que al oírle hablar, «siempre convence», pero luego «lo que hace no tiene nada que ver», tras lo que ha sugerido que es un «ladrón» por «haber usurpado» a la militancia del sistema de voto aprobado en la Asamblea estatal de Podemos.
De su lado, David Llorente ha detallado sus intenciones si es secretario general, como la de dar más protagonismo al municipalismo y a los círculos, apuntalando a ese Podemos que «ha conseguido logros significativos y marcar el camino del cambio».
Antes de dar por concluido el debate, que se ha prolongado durante hora y media, los candidatos han hecho su particular autocrítica. Así, García Molina ha reconocido que ha confiado demasiado y ha creído en palabras de políticos que luego se han cumplido y Llorente ha dicho que no ha tenido tanto contacto con la provincia que le eligió como diputado y ha pedido disculpas por «algún exceso verbal» contra García Molina, uno de los momentos más aplaudidos por el auditorio. Mientras, Fernando Barredo ha prometido «trabajar por el partido de manera desinteresada» y ha considerado que «se les ha escapado» el control a la dirección del partido.
MINUTO FINAL
El debate se ha cerrado con un minuto de alegato final para cada candidato. Y ha sido en este punto cuando García Molina ha querido «ceder» el minuto final «a la gente comprometida con los derechos laborales, sociales, la educación pública y una renta garantizada», mientras decenas de personas afines a su candidatura subían al escenario, lo cual ha sido recriminado por el resto de asistentes.
Fernando Barredo, que ha asemejado este movimiento de García Molina a un pastor con su ganado, ha dicho que los asistentes que se han quedado en sus asientos y no han subido al escenario «son tan de Podemos» como los que sí lo han hecho. Terminando su alegato final, ha insistido en que su principal idea es la de no acumular cargos si sale elegido secretario general.
David Llorente, por su parte, no ha entrado en la crítica a García Molina, y se ha limitado a abogar por «un Podemos que no dé bandazos, que asuma el reto de constituirse como alternativa de Gobierno». «Es posible otra política, con transparencia, horizontalidad y discrepancia. No queremos un Podemos en la sombra, queremos un Podemos abierto, al que le dé el sol, le dé el aire, y que tome decisiones entre todos y todas», ha finalizado.
El acto ha terminado entre aplausos y con ‘A galopar’ de Paco Ibáñez en el hilo musical. A partir de ahora queda abierta la votación para elegir nuevo líder en Podemos Castilla-La Mancha.