El secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha y presidente autonómico, Emiliano García-Page, se ha ofrecido como mediador entre el líder de su partido, Pedro Sánchez, y el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, «para ver si se ponen de acuerdo», y si no lo hacen, en todo caso, que se puedan hablar «a la cara», algo que «siempre es útil».
Así lo ha asegurado en su visita a la localidad ciudadrealeña de Santa Cruz de Mudela, donde ha puesto como ejemplo la relación entre el PSOE y Podemos de Castilla-La Mancha, donde «se están desarrollando muchas políticas» conjuntamente.
En este punto, ha dicho que ya le «acusaron» una vez «de haber cenado» con Pablo Iglesias y José Bono. «Y como se cena todos los días, no tengo ningún problema en repetir una cena para ver si se pueden poner de acuerdo», ha enfatizado.
«Me gustaría que valga en España el acuerdo que hemos sido capaces de hacer aquí entre PSOE y Podemos, que es casi un poco complicado de explicar a mucha gente, pero es un acuerdo sensato», ha dicho.
Así, ha dicho que este tipo de acuerdo es «casi más difícil que salga adelante» en Castilla-La Mancha que en otro sitio, por lo que si ha sido posible en esta región, le gustaría «ponerlo como ejemplo». «Me brindo incluso para ser un intermediario eficaz. Le echaremos simpatía, incluso coplas manchegas, para que la gente se relaje y podamos llegar a un entendimiento».
Termalismo social
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha rubricado este miércoles la recuperación del Programa de Termalismo Social del que podrán beneficiarse un total de 3.000 personas en toda la región y que proporcionará 15.000 días de tratamientos terapéuticos, curativos y preventivos a precios asequibles para mayores, dependientes y personas con graves dolencias.
García-Page ha suscrito en Santa Cruz de Mudela (Ciudad Real) un protocolo de colaboración por el que un total de nueve balnearios, distribuidos por las cinco provincias de la región, pasarán a formar parte de este programa, incluido en los Presupuestos Regionales de este año. “Un acto de justicia”, ha subrayado el presidente, para un sector “que ha sobrevivido a la crisis” y a los recortes del anterior Ejecutivo que dejó sin presupuesto este programa en el ejercicio 2015.
El presidente de Castilla-La Mancha ha destacado asimismo el carácter estratégico que el sector de los balnearios tiene para las zonas rurales donde radican y del que dependen más de 600 puestos de trabajo directos y otros 1.700 indirectos en toda la región.
Del mismo modo, Emiliano García-Page ha puesto en valor que nuestra región cuente con una de las mejores redes de establecimientos termales de España; un sector que, según ha remarcado, no sólo es “apreciado” por sus usuarios, sino que genera en el entorno “una economía y industria querida, que arraiga economía” y “un cierto tipo de turismo” al que ha augurado “un futuro extraordinario”.
El Programa de Termalismo Social de Castilla-La Mancha convocará unas estancias medias de cinco noches en establecimientos termales y, a su vez, forma parte del Programa de Envejecimiento Activo del Ejecutivo regional que ofrecerá en 2016 más de 120.000 plazas de actividades, un 20 por ciento más que el año anterior.
El presidente de Castilla-La Mancha ha estado acompañado por la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez; el alcalde de la localidad, Mariano Chicharro; el presidente de la Diputación provincial, José Manuel Caballero; la delegada de la Junta en la provincia de Ciudad Real, Carmen Teresa Olmedo; y representantes de los nueve balnearios que participan en el programa.
