La presidenta regional del PP en Castilla-La Mancha y secretaria general de la formación a nivel nacional, María Dolores de Cospedal, ve «una reacción completamente absurda y estúpida» la que ha tenido el Gobierno de Castilla-La Mancha, acusándola de perjudicar a la región con su complicidad, después de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, asegurase que su Ejecutivo había apostado por el trasvase Tajo-Segura.
A preguntas de los medios en el Parlamento regional, Cospedal, que ha ironizado con el hecho de que para el PSOE ella es «la culpable de todos los males de Castilla-La Mancha», ha explicado que el Partido Popular, a diferencia de los socialistas, se ha dedicado a «hablar de solidaridad entre todos los españoles», a trabajar por un Plan Hidrológico Nacional, y a haber hecho una negociación que permitió elevar los niveles máximos de cabecera «al doble de lo conseguido por el PSOE».
«Una cosa es protestar y otra hacer las cosas, hay unos que hablan mucho y otros que hemos trabajado para que Castilla-La Mancha tuviera más agua y un Plan Hidrológico Nacional. No voy a estar en la discusión permanente del agua, que es lo que quiere siempre el PSOE, porque ellos discuten mucho pero nunca consiguen nada», ha subrayado Cospedal, que ha eludido «entrar en más polémicas».
