Tras la inauguración oficial, Tomelloso celebra el 25 de agosto el Día de la Santísima Virgen de las Viñas. La parroquia de la Asunción un año más se ha quedado pequeña para acoger la función religiosa en honor a la Patrona, una misa oficiada por el sacerdote tomellosero Miguel Ángel Jiménez Salinas y cantada magistralmente por la Coral del Conservatorio Municipal de Tomelloso.
También como viene siendo tradicional, el alcalde de la ciudad ha pronunciado el voto anual a la Patrona (“Oración de un pueblo, sincera ofrenda, súplica y reconocido agradecimiento”) en nombre de la ciudad. Ha pedido por nuestros “amigos y vecinos”, afanados estos días en recoger “el sudor, el frío y el calor, la madrugadas y las noches en blanco”, por lo que del cielo “pueda caer” o por lo que desde los agujeros “destroza el maligno delincuente”. El alcalde ha rogado a la Virgen de las Viñas para que el trabajo de los agricultores se convierta en “alegría y prosperidad” para sus familias y “todo nuestro pueblo”.
La Virgen, inmigrante siempre en busca de lo mejor para su Hijo, entiende perfectamente, decía Carlos Cotillas, “nuestra preocupación” por nuestros hermanos en ruta, los que llegan con distinta lengua, creencias, color de piel, con las alforjas repletas de ilusión por mejorar la vida. Tras señalar el paro, la pobreza, la desnutrición, la falta de un hogar o la exclusión como consecuencias de la crisis, el alcalde ha pedido a la Virgen de las Viñas que nos enseñe a compartir, “a esforzarnos el doble por ayudar a quienes más lo necesitan”.
El alcalde ha ofrecido a la Patrona la voluntad de Tomelloso por ayudar, por ser una ciudad solidaria, pidiéndole “la oportunidad y el éxito en alimentar nuestras almas con valores humanos y nuestra frágil humanidad en prosperidad compartida”. Ha señalado que toca sensibilizarnos con el sufrimiento de Oriente Medio, África y el Este de Europa, pidiendo “una marea de hombres pacíficos que engulla los conflictos bélicos, las masacres, los asesinatos por la tierra, el agua, la religión o la energía”. También le ha pedido más tolerancia, respeto mutuo, capacidad de diálogo y empatía.
Por último, el alcalde, ha dado las gracias a nuestra Patrona por los valores que sustentan la sociedad tomellosera “hospitalidad, acogida, esfuerzo, tenacidad, amabilidad, honestidad, compromiso, pluralidad, templanza y respeto”.
La Coral del Conservatorio interpretó entre otras piezas, el Gloria de Palazón, el Ave María de Schubert, el Gabriel´s Oboe de Morricone y los aleluyas de Haendel y Mozart. Como solistas actuaron Alicia Hervás, soprano; Javier Benito, tenor; Arturo Sánchez, Violín; Alberto Palomino, violonchelo y Antonio López al oboe.
El presidente de la Hermandad de la Virgen de las Viñas, José Márquez, ha destacado la emoción que para él supone esta celebración. Poder escuchar la magnífica interpretación de la Coral, con la presencia de la Virgen de las Viñas y el templo repleto, “es algo que nos llena de gozo”. Invitó a a los vecinos y visitantes a que acudan a las celebraciones de estos días.
En el día de la Patrona ha dado comienzo la tradicional puja de los objetos donados que repetirá la Hermandad de la Virgen de las Viñas durante todas las mañanas de Feria. El programa se completa con la solemne procesión de la Santísima Virgen de las Viñas que acompañada por las Madrinas 2012 y 2013, autoridades, la banda de cornetas y tambores “Jesús del Perdón” y la banda de música de la asociación musical Santa Cecilia, recorrerá las calles de la ciudad.
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