Otra receta de temporada, y además vegetariana. Las setas son un producto estrella del otoño, y nos aportan las proteínas de la carne, sin la grasa de ésta, además de minerales. Por otra parte las espinacas nos aportan también minerales, fibra, antioxidantes y vitaminas, y los piñones, como todos los frutos secos, nos aportan proteínas y colesterol bueno. Todos son productos de temporada, pues el otoño nos regala con los mejores productos para las despensas.
Yo hago esta receta con setas de cardo, que son las que recolecto por aquí, pero vale cualquier otro tipo de setas, o incluso champiñones.
LA RECETA:
Ingredientes (4 personas): 300 grs. de setas – 400 grs. de espinacas – 50 grs. de piñones – 120 cl. de aceite de oliva – 12 placas de pasta de raviolis – media cebolla – 2 dientes de ajo – 50 grs. de queso manchego rallado – 700 cl. de leche – 1 cucharada de harina de trigo – nuez moscada – pimienta negra molida.
Elaboración: Poner a cocer las placas de pasta durante 8-10 minutos (según instrucciones del fabricante). Cuando estén cocidas enfriarlas y extenderlas sobre un paño.
Poner a pochar la cebolla y el ajo picados muy finos en una sartén con bastante fondo, o una cazuela. Añadir las espinacas troceadas cuando estén a medio pochar, rehogarlas unos 5 ó 6 minutos y añadir las setas troceadas muy finas y añadir los piñones. Dejarlo todo pochar durante unos 10 minutos, hasta que no quede agua.
A continuación, en una sartén poner un poco de aceite y echar la harina. Rehogar la harina y añadir la leche poco a poco sin parar de remover con unas varillas para que no haga grumos, añadir una pizca de pimienta y nuez moscada, y cuando comience a espesar apartarlo. Añadir algo menos de la mitad de la bechamel a la mezcla del relleno, y rellenar con ella los raviolis.
Colocar los raviolis rellenos en una fuente de horno y echar por encima de estos la bechamel restante con el queso rallado por encima. Meter unos 10 minutos en el horno precalentado a 180 grados. Sacar y servir.
Nota: Los veganos pueden cambiar la leche de la bechamel por caldo de verduras, y no poner queso.
Aconsejo para maridar este plato un rosado de la tierra; por ejemplo un Vega Córcoles o un Yugo.
¡BUEN PROVECHO!