Fermín Gassol es desde el 12 de agosto el director de Cáritas Diocesana de Ciudad Real y se encuentra este viernes en Tomelloso. Con una agenda apretada, se va a reunir con la junta directiva de Cártias Interparroquial de Tomelloso, asistirá a la celebración de la Eucaristía y a una reunión con los voluntarios, pero nos atiende amablemente. Sonriente, tiene un verbo tranquilizador y una mirada amable, nuestra charla dura apenas unos minutos; suficientes.
Fermín Gassol está recorriendo las delegaciones arciprestales de Cáritas para darse a conocer y transmitir el estilo que quiere marcar durante los cuatro años de su mandato, «que no es un estilo propio, ya que quien marca las directrices es la Asamblea Diocesana».
Las directrices de la asamblea son tres, «la prevención integral de la persona, nosotros no solo entregamos bolsas de comida, nos dedicamos a la integración de la persona en su totalidad. El segundo punto es el voluntariado joven: es fundamental el relevo generacional. Y tercero, el dar a conocer a la comunidad quien es y que hacemos en Cáritas». Pero además, «el día a día, va marcando cosas e incorporando otras cuando sean necesarias».
Los datos hacen que se pierda la esperanza «Hablo en caliente, pues la Memoria de Cáritas ha salido hace poco… es tremendo que en España haya tres millones de personas en un estado de pobreza severa y que un millón de personas no tenga ningún ingreso. Esto hace que la fractura social vaya en aumento. La esperanza en un cristiano es fundamental, y trabajamos por eso, por la esperanza. Pero ello no hace que deje de preocuparnos la situación actual, a la que no se le ve solución a corto plazo. Este es un problema social que tienen que solucionarlo los poderes públicos, nosotros somos subsidiarios».
Los voluntarios de Cáritas, ¿Cuántos son? ¿Qué les mueve? «En Cáritas de toda Ciudad Real hay 1113 voluntarios, más otros 70 que por el tiempo que dedican a la organización deben cobrar. En la iglesia somos todos voluntarios, desde el director a cualquier trabajador. Los que no cobramos en dinero lo hacemos en especie, el amor, la relación y la comprensión que tenemos con los que más lo necesitan. Eso es de una riqueza tremenda que aunque nos es tangible sí se percibe. Además de la riqueza que nos transmiten los voluntarios, el ejemplo que nos damos unos a otros de disponibilidad, de cercanía, de desprendimiento de generosidad; todo ello hace que se enriquezca tu persona. Todo ello desde una perspectiva de fe, porque si no hay fe esto no se sostiene. Nosotros no nos dedicamos solo al altruismo, nos dedicamos a trasmitir el amor de Dios a través de la caridad, que es tan antigua como la Iglesia. Me he encontrado un grupo humano de muchísima calidad y eso hace que esté muy animado en mi nueva tarea».
Vivimos tiempos difíciles… «Son difíciles, ¿en qué?… ¿en el asunto económico? A nadie se le escapa que las ayudas se han reducido, si la situación es de crisis no se pueden mantener los niveles de ayuda de antes, pero nos tenemos que buscar la vida. Hemos creado “Empresas con corazón”, que estamos poniendo en marcha y que trata de vincular el mundo empresarial con la acción sociocaritativa. El mundo de Cáritas desde fuera no se conoce, si contásemos todos los programas que llevamos a cabo la sociedad se sorprendería. Nosotros no nos limitamos a dar el pez, enseñamos también a pescar».
Siempre es recurrente, pero no deja de ser interesante saber si Cáritas pide algo a los usuarios de su ayuda. «Ni pedimos carnet ni pedimos nada. Nuestra labor es altruista en el sentido humano, pero dándole trascendencia evangélica a nuestro trabajo. Transmitimos a través de nuestro testimonio el amor de Dios… Jesucristo está presente en cada acto que Cáritas realiza».
Fermín Gassol y Ramón González, el director de Cáritas Interparroquial de Tomelloso, se reúnen con la junta directiva de nuestra ciudad. Cada uno explica lo que hace en la institución.