Hoy, sábado 19 de octubre, es el Día Mundial Contra el Cáncer de Mama. Es, por tanto, la mejor ocasión para poner sobre la mesa los datos que demuestran que estamos ante una historia de éxito en la medida en que, a través de la investigación y gracias a la brillante labor de miles de profesionales de la sanidad, la sociedad está logrando importantes avances en materia de prevención y tratamiento que están teniendo como resultado el constante aumento del índice de supervivencia de este tipo de tumor. Según datos de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) la tasa de mortalidad por cáncer de mama en España es de las más bajas. Y es que cada año se dispone de mayor información para diagnosticar precozmente y tratar el cáncer de mama, lo que ha permitido que la supervivencia global a los cinco años del diagnóstico de este tumor sea de casi el 83% en nuestro país.
Una historia de éxito, sí, pero también una historia de lucha. Hoy podemos y debemos celebrar los importantes avances alcanzados pero debemos también recordar a tantas mujeres que desafortunadamente se quedaron por el camino. Todos tenemos en nuestra memoria y en nuestro corazón a personas muy queridas a las que el cáncer de mama nos arrebató. Nos acordamos de ellas no sólo hoy, sino todos los días. Y precisamente por ellas tenemos la responsabilidad moral de tomar conciencia de la importancia de la prevención. Según datos del Observatorio del Cáncer AECC, en España se diagnosticaron 33.307 nuevos casos en 2018. La mayor parte de estos diagnósticos se encuentra en la franja de los 45 a los 65 años. Es, por tanto, fundamental, el diagnóstico temprano, que es precisamente una de las claves de que las cifras de mortalidad se estén reduciendo.
La investigación es otra de las claves. Las administraciones públicas deben tener siempre presente que es esencial dedicar esfuerzos suficientes y dotaciones adecuadas para los proyectos que tienen como fin buscar las vías de mejora en torno a la detección y el tratamiento de este tumor. Los investigadores y profesionales de la sanidad de nuestro país y, lógicamente, de nuestra región, constituyen un ejemplo de compromiso, solidaridad y generosidad. Son héroes de nuestro tiempo que dedican su vida a mejorar la de los demás, y les estaremos siempre tremendamente agradecidos. En colaboración con los investigadores, los oncólogos y el conjunto de la comunidad sanitaria, las asociaciones sociosanitarias realizan una labor encomiable que hoy debemos valorar y difundir, pues es de justicia reconocer el trabajazo que se hace, a menudo con discreción, lejos de los focos, desde entidades de Castilla-La Mancha que contribuyen a dar visibilidad a la mujer con cáncer de mama, a romper prejuicios, a difundir información útil y a cuidar a los familiares de las personas diagnosticadas. Bravo por esas luchadoras.
En definitiva, hoy es un día para valorar el camino recorrido y tomar fuerzas para lo que queda por hacer. Pero estamos en la senda correcta. Sigamos avanzando juntos, hagamos de esta lucha el hermoso legado de las que ya no están.
Carmen Picazo
Portavoz del Grupo Parlamentario Ciudadanos en las Cortes de Castilla-La Mancha