Los sabores manchegos y mexicanos, país invitado esta edición, se hermanan durante la celebración del Festival Internacional de Teatro Clásico a través de un menú degustación que se servirá en el Parador de Almagro durante la celebración de la cita de fama internacional con el Teatro del Siglo de Oro y que se basa en las recetas de Sor Juana Inés de la Cruz, personaje protagonista de este mes de julio en la cita con el teatro en la ciudad encajera.
Un menú que ha sido presentado este miércoles por el director del Festival, Ignacio García, y por el presidente consejero delegado de Paradores, Oscar López Águeda, en una cita en la que ambos han destacado lo novedoso de la iniciativa que entronca con el objetivo de ambas entidades de poner en valor el patrimonio histórico artístico del país y la colaboración que ha existido entre ambos desde el nacimiento del Festival.
Para López Águeda este menú es reflejo de la apuesta de la recuperación de la cocina regional y tradicional pero modernizada de Paradores y que ha sido elaborado por el equipo de cocina de esta entidad, en colaboración con expertos del Festival de Almagro.
UN HERMANAMIENTO CULTURAL A TRAVÉS DE LA COCINA
Por su parte el director del Festival ha puesto de relieve como esta propuesta, a la que ha definido como «hermanamiento cultural a través de la cocina», también forma parte de algunos de los objetivos que se ha propuesto la cita de Almagro desde que él asumiera la dirección.
Concretamente se ha referido a dar relevancia a las figuras del Barroco del otro lado del charco y el papel de la mujer en este movimiento cultural. Ambos se encarnan en Sor Juana Inés de la Cruz, una figura fundamental en el México del siglo XVII y cuyo recetario ha inspirado los platos que componen esta propuesta culinaria.
También ha destacado la estructura del menú que hace un guiño a las obras del Siglo de Oro y a la faceta de dramaturga de Sor Juana Inés de la Cruz. «Tiene su Loa, sus Entremeses y sus Jornadas», ha explicado García.
TRABAJO E ILUSIÓN
Trabajo e ilusión es lo que hay detrás de este menú, según la directora regional de la zona centro de Paradores, Olivia Reina Prieto, quien ha explicado junto a la jefa de cocina del Parador de Almagro, Estrella Díez. y su homónimo en Cuenca, Miguel Ángel Martínez, la composición de unos platos que han tratado mezclar los sabores de ambos países.
Así se han podido degustar durante esta presentación entre otros croquetas de gachas y de frijoles, tamales, guacamole, migas, perdices con chocolate, camarones con mango o recetas del convento de San Jerónimo en Ciudad de México, transcritas por de Sor Juana Inés de la Cruz como buñuelos de queso, que para la ocasión se ha maridado con un pisto manchego, Jericaya -una especie de natillas– o ante de almendras, un bizcocho remojado en almíbar.