La llegada de la crisis económica a España supuso un gran frenazo a nuestro crecimiento y a nuestras expectativas como país. Pero la crisis también está produciendo daños que no eran tan simples de intuir como los relacionados con la cuestión demográfica. España, Castilla-La Mancha, Ciudad Real, nuestra comarca, y nuestro pueblo Tomelloso pierden población desde el año 2012.
Tomelloso contaba con 29.586 habitantes en 1996, una cifra que ascendió a 35.637 habitantes en el año 2007, y que, al calor de un buen número de nacimientos y con la llegada de miles de nuevos vecinos en busca de oportunidades laborales, fundamentalmente nacionales de otros países, llegó a su máximo histórico en 2012, con 39.093 habitantes. En quince años, Tomelloso había crecido 10.000 habitantes. Con ese aumento poblacional, la economía local sufrió un crecimiento exponencial, se necesitaron miles de viviendas, nuevos servicios, establecimientos de alimentación y ocio, etc.
En 2012, con la llegada de la peor fase de la crisis económica, Tomelloso comenzó a perder población y, como resultado, 2.812 personas dejaron de estar empadronados en la localidad en 5 años, lo que supone una media de 562 personas menos por año, aunque sin duda el año más difícil para la ciudad fue el año 2015, cuando la población descendió en 899 habitantes.
En el último año, el descenso de población ha sido de 465 personas, siendo la población actual de 36.281. Desde un punto de vista comparativo, la ciudad de Puertollano está sufriendo un fenómeno similar con el descenso de 3.520 habitantes, ambas tienen un sector industrial y de construcción poderoso, que se ha resentido de forma notable durante los años de la crisis. Por su parte, Alcázar de San Juan descendió 1.049 habitantes en los últimos cinco años y Valdepeñas ha perdido 988 personas.
La pregunta clave y que nos hacemos todos es ¿quién se ha ido durante estos años? La respuesta es fácil, la población que ha dejado de estar empadronada en Tomelloso es sobre todo la población nacional de otros países. En 2012 vivían en Tomelloso 7.260 extranjeros, según, por 31.823 españoles, según la web de estadística de la región. En el año 2016, el número de españoles era de 31.939, cifra levemente superior, que posiblemente se debe a los procesos de nacionalización de personas extracomunitarias en estos últimos años, mientras que el número de extranjeros era de 4.807, similar a las cifras de extranjeros en el año 2007. Este descenso de personas de otros países, fundamentalmente de Rumania, Colombia, Ecuador o Marruecos, se ha producido por causa de la crisis económica, la falta de oportunidades laborales –recordemos que la tasa de desempleo es superior al 20%-, o por la mejoría económica en sus países de origen. Cuando conozcamos los datos de 2017 suponemos que las proporciones serán similares.
Por último, conviene señalar que Tomelloso también se enfrenta a un nuevo reto, que es el de tener una tasa de mortalidad igual o superior a la tasa de natalidad. En los últimos años, estas tasas se han igualado, lo que implica que la población del municipio no se incrementará por una diferencia positiva entre los que nacen y los que mueren, y que, a largo plazo, esta tendencia será negativa para la localidad y producirá cifras de descenso de población, sobre todo la población en edad escolar, y un incremento del número de personas mayores y de los servicios que estos necesitan.
En conclusión, Tomelloso, sigue siendo el tercer municipio de la provincia, y la cuestión demográfica es en estos momentos una cuestión a abordar y a tener en cuenta. El descenso de población incide en la economía local y el progresivo envejecimiento de su población obligará a dotar a la localidad de más y mejores servicios sanitarios y de atención a la dependencia. Estar preparados para ello será un reto en el futuro más inmediato.
