Este lunes han comenzado en Tomelloso los dos proyectos más importantes de eficiencia energética en los que el Ayuntamiento viene trabajando desde el pasado año y durante este 2018. Dos proyectos que, según ha explicado el concejal de este área, Álvaro Rubio, acompañado por el alcalde en funciones, Francisco José Barato, van a suponer, en su totalidad, una inversión de en torno a 780.000 euros; la renovación de unos 2.000 puntos de luz en calles de la localidad y un ahorro de alrededor de 115.000 euros anuales en la factura municipal de energía eléctrica.
El primero de los proyectos, con cargo a superávit municipal está valorado en unos 550.000 euros y el segundo, que se va a realizar gracias a una ayuda del Instituto para la Diversificación y ahorro de la Energía (IDAE), conseguida en febrero del año pasado, en unos 490.000 euros; algo más de un millón de euros en total los dos proyectos, que finalmente van a quedar en alrededor de 780.000 euros, tras las bajas presentadas por la empresa adjudicataria que va a desarrollar ambos.
Aunque los trabajos deberían haber comenzado con un mes de margen entre uno y otro, ha explicado Rubio, finalmente se van a solapar en el tiempo y se espera que ambos proyectos estén finalizados en febrero de 2019.
El proyecto que se va a realizar con cargo a superávit engloba 63 calles repartidas por toda la ciudad y supondrá un ahorro estimado, para las arcas municipales, de entre 55.000 y 65.000 euros anuales en la factura de la luz, “dependiendo del coste de la luz; cuanto más cara sea más nos ahorramos”, ha incidido, ha recalcado Rubio. Se sustituirán 1.100 puntos de luz por otros más eficientes energéticamente en calles como Mediodía, José Gureso, Santa María, Claudio Coello, León, Santa María, Avenida Virgen de las Viñas, Monte, Alcudia, Norte, Socuéllamos o Hernán Cortés. Calles y avenidas todas ellas principales de la población. Incluye también edificios importantes como la Casa del Gallego, la plaza de Toros o la Glorieta de María Cristina y polígonos industriales como El Bombo, “donde tenemos también un consumo elevado y las empresas necesitan una mejor iluminación para publicitarse y tener una mejor imagen en la fachada de sus empresas”, ha explicado el concejal.
El segundo de los proyectos, el que contará con subvención del IDAE, permitirá un ahorro de entre 40.000 y 50.000 euros. En este caso se cambiarán 864 puntos de luz en diferentes barrios de la ciudad. Entre otras, Carretera de la Osa de Montiel, Guarnicioneros, Jacinto Espinosa, Arenal, Severo Navarro, San Roque, Campomanes, Amalia Cepeda, Santa Rita, Calatrava y Francisco García Pavón. Son calles que, en algunos casos, ha apuntado el concejal de Eficiencia Energética, tenían problemas de iluminación, que ahora se va a ver mejorada.
Con estos dos proyectos, el Ayuntamiento habrá cubierto el cambio a iluminación led en prácticamente el 50% de la población, lo que supone “un avance muy importante en esta legislatura que Tomelloso debe seguir en el futuro para continuar en la misma línea de eficiencia energética, cambiando la iluminación en las calles que quedan”, ha apuntado Rubio.
A estos dos proyectos se sumará este otoño otro más con cargo a los fondos europeos FEDER logrados por el Ayuntamiento. Supondrá una inversión de 750.000 euros en un primer paso, ha explicado el concejal, para conseguir la certificación energética de edificios municipales. “Esperamos que para mediados 2019 podamos tener los edificios con su certificación, con su etiqueta, igual que cualquier electrodoméstico, que incluirá consumo energético y las emisiones de co2 que tiene ese edificio”
El proyecto incluye, ha avanzado Álvaro Rubio, un estudio sobre las mejoras a acometer en cada uno de los edificios en materia de instalaciones térmicas, climatización, aislamiento y ventanas e incluso de inclusión de energías renovables en aquellos edificios que lo permitan.
“Ese proyecto lo estamos mimando mucho para que tengamos un futuro energético bastante sostenible dentro de la población y ya que hemos hecho un esfuerzo importante de alumbrado exterior, tenemos que hacerlo también en eficiencia en el interior de los edificios municipales”, ha recalcado el concejal de Eficiencia Energética, quien asegura que se trata también de “dar un ejemplo y que sirva para sensibilizar y educar a la población en el sentido de que hay que cuidar la energía, no desperdiciarla y ser lo más eficientes posible”