Los españoles prefieren productos frescos a la hora de alimentarse, pero hay grandes diferencias en la cesta de la compra según el territorio y, por ejemplo, en el caso de los castellanomanchegos son los que menos vino beben, pese a presumir de ser la región vitivinícola más extensa del mundo.
Cabe reseñar que los que más carne comen son los castellanoleoneses, los gallegos consumen casi el doble de pescado que los baleares y a los asturianos les gusta la fruta, según datos recogidos en el último informe sobre producción, industria, distribución y consumo de alimentación en España, que publica el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente.
Un informe que deja estadísticas curiosas, algunas de las cuales hacen bueno el refrán ‘En casa del herrero, cuchillo de palo’, como en consumo de vino, pues en Castilla-La Mancha es de 1,7 litros y en La Rioja, una de las más conocidas denominación de origen de vino español, 1,8 litros frente a los 4,2 de media de cada español.
Baleares es en donde más vino con denominación de origen se toma, 7,9 litros, seguida de País Vasco, con 6,4 litros.
Otro dato llamativo es que en la cuna del plátano español, Canarias, se coma menos fruta que la media y de que sea en el otro extremo del país, en Asturias, donde se devoren más kilos de manzanas, naranjas o peras.
Si la ingesta de fruta es el termómetro de una alimentación sana, los asturianos se llevan la palma, por delante de castellanoleoneses, vascos, navarros, gallegos y aragoneses, porque todos ellos se llevan a casa, de media, más de cien kilos al año.
En el lado opuesto, los riojanos sólo comen 77,2 kilos de fruta, muy por debajo de los 99,5 kilos de la media nacional.
Ahora bien, el estudio alerta de otro dato: el hecho de comprarla no significa que se ingiera porque, de hecho, la fruta es el alimento que más se desperdicia.
De otro ingrediente saludable como las hortalizas -tanto frescas como transformadas- entran en las casas españolas unos 60 kilos al año, cifra que se eleva hasta los 78,9 kilos en Aragón y los 65,9 en Cataluña, pero que baja a los 47,5 en el caso de Cantabria.
Por detrás de frutas y verduras se sitúa el consumo de carne, con 50,1 kilos por familia y año. En este apartado, una comunidad con fama en sus productos cárnicos como Castilla y León se coloca a la cabeza, con 58,7 kilos por persona de media, algo más que los 57,1 kilos que devoran los aragoneses.
Y Galicia, exponente de productos de mar por excelencia, es la autonomía donde más pescado se consume, 32 kilos de promedio, mucho más que otros territorios rodeados de mar como Canarias (18,6) y Baleares (17,7). La media de los españoles es de 25,5 kilogramos de pescado y marisco.
También es la comunidad gallega la que gasta más aceite de oliva, hasta 10,8 litros al año, cifra a la que se acercan sus vecinos de Cantabria y Asturias, así como La Rioja, todas ellas por encima de los 8,5 litros del promedio nacional.
El siguiente cuadro recoge por comunidades el consumo per cápita de alimentos (en kilos) y bebidas (en litros el aceite de oliva y el vino de denominación de origen):