La capacidad de afrontar situaciones de fracaso personal y profesional y convertirlas en valores positivos para la vida ha dado título a una divertida y emotiva Jornada ‘Fuckup Nights’, que la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha ha celebrado con gran éxito en Ciudad Real.
El Auditorio de Indra Software Labs se llenó para escuchar los testimonios de cuatro ponentes: Salva,ex componente de Mago de Oz, Juan Ángel Hernández, CEO de Estrategias de Inversión, Indalecio Gil, miembro del consejo de Bultaco y Goyo Hernández, CEO de FEEBBO.
La Jornada estuvo dirigida por el Director de Emprendimiento e Innovación de la Fundación Caja Rural de Castilla-La Mancha, Vicente Muñoz.
Es la primera vez que se organiza una Jornada ‘Fuckup Nights’ en Castilla-La Mancha, integrada en el programa ‘Lazarus’ de la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha (su incubadora y aceleradora de empresas innovadoras), para que los emprendedores y el resto de asistentes al evento puedan aprender de la experiencia de los ponentes.
Aprender de los errores
‘Fuckup Nights’ es el movimiento de emprendedores y creadores más activo del mundo, en el que no se comparte el éxito, sino el fracaso. Por eso está abierto a emprendedores y a quienes crean que se aprende más del error que del acierto.
Este movimiento nació en Ciudad de México en septiembre de 2012 una noche en la que cinco amigos –sus actuales cofundadores- compartieron sus experiencias más amargas en el mundo de los negocios.
Desde entonces, en cada sesión, tres ó cuatro emprendedores comparten su fracaso usando siete minutos y diez imágenes cada uno.
Desde sus inicios, alrededor de 2.500 ‘fracasados” han compartido sus historias ante más de 200.000 asistentes en más de 200 ciudades de 72 países del mundo.
En España se organizan eventos regulares de este tipo en 11 ciudades: Palma, Vitoria, Pamplona, Sevilla, Madrid, Barcelona, Zaragoza, San Sebastián, Badajoz y Logroño.
Para la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha, ha sido una experiencia muy positiva y enriquecedora, ya que la forma en la que actuamos frente a las dificultades condiciona nuestra disposición para afrontar nuevos retos.