Las Cortes de Castilla-La Mancha han rechazado en la sesión plenaria de este jueves con los votos de PSOE y Podemos una resolución del PP que pedía al Parlamento instar al Gobierno autonómico a bajar ciertos tributos de su competencia, si bien el consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha abierto la puerta a estudiar esta propuesta con los ‘populares’ en próximos días.
El PP pedía en la resolución bajar el IRPF un punto porcentual en sus dos tramos autonómicos, bajar y unificar los impuestos de sucesiones y donaciones con bonificaciones de hasta el cien por cien para rentas bajas, bajar el impuesto de transferencias patrimoniales hasta el 7% para equipararse con la Comunidad de Madrid, descender medio punto la tasa de actos jurídicos documentados o eliminar el céntimo sanitario.
Si bien el sentido del voto de la bancada socialista ha sido negativo, el consejero de Hacienda ha pedido al PP retirar la resolución antes de su votación para que pudiera ser estudiada por los técnicos de la Consejería, algo a lo que el PP se ha negado, ya que según el diputado que ha defendido la misma, José Manuel Tortosa, «la propuesta no es nada nuevo y esta legislatura ya ha habido el tiempo suficiente para que el Gobierno la conociera».
En todo caso, el titular de Hacienda, que ha dicho que sin conocer el alcance real de esta propuesta no se puede votar a favor, ha ofrecido la posibilidad de estudiar dicha proposición en los próximos días para ver si tiene encaje presupuestario.
Igualmente, ha pedido a los grupos parlamentarios que ocupan la Cámara regional que no se centren en discutir las «migajas» impositivas que gestiona la región, que apenas tienen un 25% del peso del total del estado de ingresos, y que se centren en «ir de la mano» para reclamar conjuntamente al Gobierno estatal una mejor financiación autonómica.
Así lo ha puesto de manifiesto durante su intervención en el transcurso de un debate general celebrado en el Parlamento regional sobre la política tributaria planeada por el Ejecutivo autonómico para el próximo ejercicio.
En todo caso, en lo que sí ha insistido Ruiz Molina es en no centrar el debate en el poco margen de maniobra de la autonomía en cuanto a la gestión de sus impuestos.
«En lugar de discutir estas modificaciones tributarias, sería más importante que haya una verdadera reforma fiscal que permita incrementar recursos y tener un sistema de distribución más justo en la carga impositiva entre impuestos directos e indirectos», ha manifestado.
PODEMOS: «TIENEN EL CARAJO DE HABLAR DE IMPUESTOS»
El diputado del Grupo Parlamentario de Podemos David Llorente ha comenzado su intervención afirmando que este debate «se repite más que el gazpacho» y que «visto el historial, se tratará una vez más de asustar y agitar el miedo con un pretendido infierno fiscal» por parte del Gobierno regional «con la complicidad de Podemos» cuando, a su juicio, «lo único que se ha hecho es suprimir algunas tasas y mejorar la progresividad del impuesto de transmisiones patrimoniales y el de donaciones y sucesiones».
«Tienen el cuajo de venir a habar de impuestos, ustedes –el PP– que han crujido a la gente con el 21 por ciento de IVA, mintiendo a la ciudadanía e incumpliendo sus promesas mientras concedían amnistías fiscales a los más pudientes defraudadores y donde se encontraban muchos amigos suyos. Ustedes, que son el primera partido político imputado en democracia, por fraude fiscal y blanqueo en capitales».
No obstante, Llorente, que ha continuado recriminando con que «Génova ayudó a blanquear», ha dicho que Podemos no iba a «eludir este debate» y ha opinado que el debate sí podría centrarse en «la previsión de ingresos» reflejados en el presupuesto regional de 2016. «Podría ser una crítica el contraste entre la previsión y la obtención de ingresos, que se ha quedado en un 94,3 por ciento».
Y ha dirigido al Gobierno central diversas críticas y peticiones en este ámbito, entre las que ha refrendado que el cumplimiento del déficit para las autonomías «no puede dejarse a costa de ejecutar el gasto necesario en inversiones». «También hay necesidad de avanzar en una reforma fiscal y tributaria que permita una tributación más justa y progresiva».
PSOE: «C-LM GESTIONA EL 6% DE LOS INGRESOS QUE FIGURAN EN EL PRESUPUESTOS»
Por su parte, el diputado del Grupo Parlamentario Socialista Fernando Mora ha reiterado en su exposición que «a todos» les gustaría que se bajen los impuestos, pero ha apuntado que hay que ser «conscientes que las competencias de la región requieren de recursos imprescindibles para prestar servicios públicos». «El sistema impositivo tiene que caracterizarse por su progresividad y la justicia en el reparto», ha añadido.
Por ello, ha lamentado que hay impuestos que «no se pueden eliminar hasta que no lo haga el Gobierno de España» y ha resaltado que Castilla-La Mancha «gestiona aproximadamente el 6 por ciento de los ingresos que figuran en su presupuesto a través de los impuestos propios».
En este sentido, ha confiado en que el modelo de financiación autonómica que se plantee «permita a todos tener los recursos suficientes para garantizar el modelo más justo y que ninguna región juegue con ventaja, para que los ciudadanos puedan tener las mismas prestaciones, servicios y derechos».
«A Madrid le cuestan infinitamente menos los servicios como sanitarios o educativos. Fuenlabrada con cuatro centros de salud presta servicio sanitario, mientras que en Cuenca tenemos que tener 10 centros y 80 consultorios médicos. Lo mismo con la educación y otros servicios que se prestan en zonas rurales. Hay que ser conscientes de dónde estamos, con una población tremendamente dispersa y rural», ha explicado Mora sobre este aspecto.
PP: «NO PUEDE SER QUE LOS CASTELLANO-MANCHEGOS TENGAN QUE RENUNCIAR A LA HERENCIA»
El diputado del Grupo Parlamentario Popular José Manuel Tortosa ha señalado que con este debate pretendían «impedir que el Gobierno regional suba los impuestos como hicieron en 2016» e intentar que las Cortes «tomen la decisión de bajar los impuestos a los castellano-manchegos» porque, entre otras cosas, «no puede ser que tengan que renunciar a la herencia que les dejan sus padres, que es el fruto del trabajo de toda una vida, porque tienen que pagar unos impuestos que hacen inasumible esa herencia».
Entre los impuestos propuestos a rebajar, Tortosa ha citado un 1 por ciento del IRPF, bajar y unificar impuestos de sucesiones y donaciones con bonificaciones del 95 por ciento para todos y del 100 por cien a las rentas más bajas. También la propuesta de resolución tras este debate incluía la bajada de impuestos en transmisiones patrimoniales en dos puntos, del 9 al 7 por ciento, con la intención de «acercarlo al de la Comunidad de Madrid y evitar el efecto frontera».
Asimismo, ha propuesto un tipo de reducido de la vivienda al 5 por ciento y reducir medio punto el impuesto sobre actos jurídicos documentados, así como también reducir el impuesto sobre hidrocarburos.
«Proponemos una bajada de impuestos frente a la subida que proponen PSOE y Podemos, para afianzar la recuperación económica y la creación de empleo y poner a Castilla-La Mancha en una situación ventajosa desde el punto de vista impositivo frente a otras regiones que son el destino de castellano-manchegos por este motivo», ha manifestado el diputado ‘popular’, que ha ironizado con que la situación hace que los agricultores «pidan a sus seguros agrarios que cubran las propuestas dañinas de García-Page».