Funcas prevé que las comunidades autónomas de Baleares, Castilla-La Mancha, Cataluña, Comunidad Valenciana, Galicia, Madrid y País Vasco crecerán por encima del 3,1% este año, la media para el conjunto de España, crecimiento que se desacelerará hasta el 2,3% en 2017, según sus previsiones para las comunidades autónomas en el periodo 2016-2017.
En concreto, en el caso de Castilla-La Mancha, Funcas prevé que el PIB de la región crecerá este año un 3,2% con un mayor peso del sector servicios y un menor peso de la construcción que en 2015, cuando la economía creció a igual ritmo. Para 2017 se prevé un crecimiento del 2,5%, con una ralentización más acusada en servicios e industria.
La actividad en la construcción podría mantenerse estable, mientras que el empleo en términos de EPA aumentará un 3,2% este año y un 1,7% el próximo y la tasa de paro bajará del 26,4% en 2015 al 23,6% en 2016 y al 22,1% en 2017 en la Comunidad Autónoma.
Según Funcas, este año la senda de la recuperación, que es «sólida», se mantiene en los dos primeros trimestres gracias a la diversificación de la economía y a que estas siete comunidades crecerán por encima de la media. De cara a 2017, el crecimiento se mantendrá más elevado en las regiones del Eje Mediterráneo, Valle del Ebro, Galicia, Madrid y Extremadura, con un repunte «superior a la media».
Por el contrario, las zonas menos dinámicas serán Asturias, Cantabria, Castilla y León y Extremadura, que no logran aprovechar el auge exportador y, además, tienden a perder población.
En rueda de prensa en Zaragoza, el director general de Funcas, Carlos Ocaña, ha indicado que, en todo caso, todas las comunidades participan de ese proceso de recuperación de la economía, aunque lo hacen de forma «desigual», y ha recalcado que se trata de una recuperación «diversificada», que se apoya en todos los sectores, en especial en la industria, la construcción «que se recupera» y el sector servicios.
Ocaña ha precisado que durante los años de crecimiento esas diferencias tendían a converger y, por tanto, se reducían, pero con la crisis «se agrandaron» y ahora ese aumento «se ha parado, pero se va a mantener, no se van a reducir».
Sobre la tasa de desempleo, han destacado que Navarra será la única región donde el paro bajará del 10% en 2017, mientras que Andalucía, Castilla-La Mancha, Canarias y Extremadura se mantendrán con un paro por encima del 20% e incluso del 25%, mientras que en cinco regiones (Aragón, Baleares, Navarra, País Vasco y La Rioja) se situará por debajo del 15%.
Respecto a los retos de futuro, Funcas menciona el desempleo, la reducción de la deuda pública, la disparidad en la renta per cápita de las comunidades y la dualidad del mercado laboral, según han detallado en rueda Carlos Ocaña, y el director de Coyuntura y Estadística de la entidad, Raymond Torres, acompañados por el director general adjunto de Ibercaja, Francisco Serrano.
FACTORES EXTERNOS
Torres ha resaltado que la recuperación de la economía española es «muy superior» a la media de la zona euro, de «más del doble», y aunque en 2017 se produzca una «ralentización», aún así el crecimiento al 2,3% estará por encima de los socios europeos. En este sentido, ha agregado que la desaceleración prevista para el próximo año ya se nota en algunos indicadores, como los pedidos a la industria.
En cuanto a los factores de desaceleración prevista para 2017, Funcas ha apuntado que son «externos», debido al debilitamiento del comercio internacional, «aunque las exportaciones españolas crecen en bienes y servicios de mercado», ha alegado Raymond Torres; y a las incertidumbres ligadas a la decisión de Reino Unido de salir de Europa, conocido como ‘Brexit’, que podría afectar a las comunidades con una fuerte presencia de turismo británico, como Andalucía.
Otro factor externo que ha mencionado Torres es el «previsible fin» de las medidas de estímulo monetarias, que podrían prolongarse «algo, pero no más allá del segundo semestre de 2017», así como el fin del ciclo electoral en España y los ajustes que se producirán «en materia de impuestos, de gasto y consumo público» y la política fiscal que «se va a endurecer algo el año que viene y podría pesar en el crecimiento», ha manifestado Torres.
Sobre el posible endurecimiento de la política fiscal, el director general de Funcas, Carlos Ocaña, ha añadido que se han fijado nuevos objetivos de déficit para las comunidades que, según sus previsiones, son «perfectamente alcanzables» este año, mientras que en 2017 será necesario «ajustarse, vía ingresos o gastos». Además, en cuanto se forme el nuevo Gobierno central, «habrá que adoptar medidas correctivas».
DESAFÍOS DE FUTURO
Raymond Torres ha citado, respecto a los retos de futuro, en primer lugar el paro, debido a la «distribución desigual de las tasas de desempleo» en las distintas regiones. Mientras que las comunidades del sur español «están por encima del 23-24%», en el Valle del Ebro, Aragón, Navarra, País Vasco, La Rioja y Baleares se encuentran entre el 10% y el 14%, y en 2017 «va a seguir esa diferencia geográfica» y se ampliará «la brecha».
El segundo desafío es «la deuda pública», con un comportamiento también desigual en las comunidades. Así, hay comunidades que tienen «una deuda pública importante», como Cataluña o Valencia, por encima del 30% del PIB y muy por encima de la media del 24%», mientras que Andalucía o Asturias, «con más dificultades económicas, tienen una deuda pública inferior», lo que significa que «están haciendo un esfuerzo desde el punto de vista fiscal», ha aclarado Torres.
En tercer lugar, ha citado la disparidad de la renta per cápita, que entre 2000 y 2007 había tendido a converger, algo que «se ha interrumpido» y en los años de crisis la renta per cápita ha caído más «en las comunidades más desfavorecidas». «Ahora crece prácticamente igual», ha dicho el director de Coyuntura y Estadística de Funcas, al comentar que esta situación se produce también en otros países.
Revertir estas diferencias «requiere de atención por parte de las políticas públicas» y existen dos opciones, invertir en las áreas geográficas más empobrecidas, pero con una inversión «eficiente, que sirva para crecer en el futuro» y aprovechar las ventajas que ya existen en algunas comunidades; mientras que también se podría favorecer la migración a las regiones con una expansión «más dinámica», pero supondría despoblar el territorio en zonas donde la población «ya ha disminuido fuertemente».
Raymond Torres ha continuado alertando de que «persiste» la dualidad del mercado de trabajo, con empleo temporal, de corta duración e interino, y están creciendo otras formas de empleo, como el trabajo autónomo, lo que requiere de la toma de medidas, ya que las políticas activas de empleo son «débiles, no son suficientes», ha opinado.
BANCOS Y CAJAS
Por otra parte, Carlos Ocaña se ha referido a la situación del sector de la banca y las cajas de ahorro para sostener que continúan los ajustes, que incluyen «el cierre de oficinas», unos cambios vinculados a la propia situación de la economía y a la mayor presencia de las nuevas tecnologías, que hacen necesarios menos recursos humanos en las entidades. «Es una tendencia a largo plazo que es mundial y que har� que el sector financiero en todo el mundo cambie», ha apuntado.
Ocaña se ha referido también a la financiación autonómica, para señalar tajante que «es imposible que el sistema de financiación autonómica cambie la renta per cápita de los españoles» y al ser un sistema pactado, ha sostenido que «cambiarlo es complicado y costoso», por lo que se ha mostrado «escéptico» sobre las posibilidades de afrontar ahora este debate cuando «hay otras prioridades».