Coincidiendo con la Semana Santa, acompañamos al concejal de Promoción Económica, Manuel Rodrigo a visitar Panaderos Artesanos J. Sánchez, que llevan desde 1752 elaborando pan en Tomelloso, para interesarnos por la fabricación de los dulces típicos de estas fiestas, además de por conocer un poco más a una de las empresas emblemáticas de la ciudad. Nos atiende el actual propietario, Jesús Sánchez, que es la cuarta generación en “las artes blancas”, que apuesta, explica, por la elaboración artesana de los productos.
Panaderos Artesanos J. Sánchez tienen 3 tiendas, abiertas todas en época de crisis. Han ido pasando, explicaba Jesús Sánchez, de un negocio tradicional como era el reparto a domicilio: mujer mayor, que trabajaba en su casa y a la que le panadero le llevaba el pan. Ahora la mujer trabaja fuera de casa, con lo cual el reparto ha ido disminuyendo y hay que darles servicio a los clientes en la tienda. No obstante, señalaba, las dos formas de venta van a convivir durante mucho tiempo. Actualmente tienen sobre veinte trabajadores en plantilla.
Nos muestra la masa de las hojuelas, para las que utilizan la fórmula tradicional, usan pulpa de naranja, ralladura de limón, aceite refinado aromatizado con canela. Destaca el panadero la gran aceptación de este típico dulce de la Semana Santa Manchega en la clientela. Explica Sánchez que el secreto está en hacerlas como se han hecho siempre, esto es, extendiendo la masa con rodillo, de tal forma, que se le dé el grosor necesario, dejándolas prácticamente transparentes. Eso, unido a los ingredientes naturales, produce al comerlas una explosión de sabores incomparable. Durante la campaña elaboran más de una tonelada de estos frutos de sartén.
Las hojuelas, una vez sacadas del horno y antes de ser embolsadas tienen que reposar, pues, necesitan respirar. Todo el producto se va vendiendo a diario.
Otro de los dulces típicos de Semana Santa que elaboran son las torrijas, llevan dos años fabricándolas. Asegura que no son muy típicas de La Mancha, pero que cada vez tienen más aceptación. Panaderos Artesanos J. Sánchez fabrican torrijas con quince sabores distintos, por ejemplo de turrón, de arroz con leche, de dulce de leche, de dulce de calabaza, cambiándolas cada día, explicaba. También elaboran roscas de fideos, con miel, que venden por porciones; barquillos fritos, flores manchegas y rosquillos fritos.
La elaboración de dulces en Sánchez Panaderos Artesanos ha sufrido una evolución. Cuando empezamos, nos cuenta, los dulces tenían más importancia, pero empezó a crecer la demanda de panadería, con el consiguiente detrimento de la repostería. Eso fue en la época de su padre y su abuelo. Cuando Jesús Sánchez se puso al frente del negocio empezó a incrementar la fabricación de dulces. En ese sentido, explicaba que el consumo de pan ha ido disminuyendo y aumentando el de la repostería y pastelería, adaptándose a las necesidades del mercado.
Jesús Sánchez señalaba que fabrican en la actualidad 40 variedades distintas de panes, con distintos tipos de masa, de masa madre, usando 8 tipos de harina de trigo distintas, además de otros tipos de cereales. El empresario explicó que tienen la intención de ampliar las instalaciones con el fin de, entre otras, cosas, separar la panadería de la pastelería.
Panaderos Artesanos J. Sánchez disponen de siete furgonetas de reparto, siete tiendas móviles, señala el panadero. Fabrican entre 700 u 800 kilos de pan al día, llegando a la tonelada los sábados.
Insiste Sánchez en que todas las recetas que usan son tradicionales. También destaca en la formación, tanto la del propio empresario, como la del personal del obrador, viajan fuera para conocer las tendencias e innovar. Tratan de hacer un combinado con la tradición y las nuevas tendencias.
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