La Guardia Civil ha detenido a un hombre, vecino de Tomelloso, como presunto autor del secuestro de una mujer en Torredonjimeno (Jaén), a la que el pasado día 1 por la noche abordó cuando llegaba a su garaje trasladándose con ella después en un «periplo» por varias localidades, algunas de Ciudad Real, en el que supuestamente la agredió sexualmente, le causó lesiones y sustrajo con su tarjeta dinero en cajeros de diversas entidades bancarias.
El subdelegado del Gobierno en Jaén, Juan Lillo, y el teniente coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en esa provincia, Luis Ortega, informaron ayer sobre la operación ‘Corso’ puesta en marcha tras la denuncia de la mujer, a la que el agresor abandonó finalmente en Martos al mediodía del día siguiente.
Fue ese mismo 2 de junio cuando el Instituto Armado recibió la denuncia de esta vecina de Torredonjimeno poniendo en conocimiento del Equipo Mujer-Menor (Emume) haber sufrido un secuestro y agresiones. Según explicó, bajo amenaza de un arma blanca fue maniatada por un hombre e introducida en el maletero de un coche y fue trasladada durante más de 200 kilómetros hasta Tomelloso, según informó Diario de Jaén.
Durante el secuestro, sufrió agresiones sexuales y diversas «lesiones de gravedad», por las que tuvo que ser ingresada en un hospital de Jaén y que han permitido a los agentes considerar la existencia de un homicidio en grado de tentativa. Además, obligó a la mujer a enviar mensajes «para tranquilizar» a sus familiares, que la llamaron al notar que no había regresado a su casa.
Para iniciar su investigación, la Guardia Civil sólo disponía de la información aportada por la víctima con la descripción física y el color del jersey que llevaba el hombre, un hombre de nacionalidad extranjera que tenía tres órdenes de búsqueda de juzgados de Alcorcón y Tomelloso y que contaba con antecedentes policiales por violencia de género además de un decreto de expulsión del territorio nacional.
Una vez activadas tanto las unidades de investigación como las operativas, dio comienzo la búsqueda en las provincias de Jaén y Ciudad Real, que, dado la forma de abordar a la víctima, probablemente «de alguna manera controlaba» parte de sus movimientos.
Se fijó un riguroso dispositivo para su interceptación, en el caso de que intentara salir de ciertas localidades. Sin embargo, al tener conocimiento de que estaba realizando gestiones para conseguir un pasaporte y salir de España, intervino la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO), que colaboró con la Unidad Orgánica de Policía Judicial y el Servicio de Información de la Comandancia en la localización del presunto autor. Una vez localizado y tras realizar las oportunas actuaciones con el Juzgado competente, se diseñó su arresto en el domicilio que el presunto agresor tenía en el último mes, en Torredonjimeno, donde se encontraba «agazapado». Ello y junto con la «violencia» que había demostrado, llevó a que fuera ejecutada minuciosamente a las 19.30 del pasado viernes, día 12, por una unidad especial de intervención del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil con sede en Sevilla.
