En contadas ocasiones tenemos la oportunidad de asistir a un recital como el que este sábado ofreció la soprano Ainhoa Arteta en el Teatro Municipal de Tomelloso. Más de medio millar de personas acudieron al coliseo. La cantante, acompañada por Rubén Fernández al piano, respondió con creces a la expectación despertada y al cariño con el que fue tratada por el público tomellosero. Para añadirle singularidad a la noche, al concierto asistió el músico y compositor Antón García Abril.
Arteta mostró en la sala la extraordinaria calidad de su voz, sus increíbles matices, además de su simpatía y cercanía con el público. Ofreció un recital con música española (salvo uno de los bises), en el que Rubén Fernández, en perfecta comunión con la soprano, estuvo brillante.
La primera parte la inició con Tiranilla y Boleras de Aracil, siguió con Despierta de Juan Cruz Guevara y llegó a la Tarara contemporánea, desvergonzada, rompedora y brillante de Pilar Jurado. Continuó con la Oración de las madres que tienen a sus hijos en brazos, estremecedora pieza de Falla. La primera parte acabó con las Siete canciones populares españolas de Manuel de Falla.
La segunda parte comenzó con música de Antón García Abril, Tres canciones sobre textos de Antonio Machado dedicadas a Ainhoa Arteta: Una tarde disecada, La plaza tiene una torre, Un ramo de rosas me dio la mañana y Canciones del Recuerdo: Alba y Ciego de amor. El turolense recibió en pie la gran ovación del público.
La noche continuaba con dos músicos catalanes, Granados con La maja de Goya, El majo tímido y El majo discreto. Las coplas de Obradors ponían fin al programa.
Los dos bises, el necesario O mio babbino caro de Gianni Schicchi y De España vengo de la zarzuela El niño judío (que la soprano interpretó con un mantón de manila sobre los hombros), supusieron la apoteosis del concierto. Una noche que será recordada.
Acabado el espectáculo abordamos al maestro García Abril, muy contento con la interpretación de la soprano. El compositor alabo la calidad del Teatro Municipal de Tomelloso, destacó la sonoridad de la sala y lo bello del diseño. Antón García Abril elogió al público asistente, muy educado musicalmente y muy agradecido con los intérpretes.
“He disfrutado mucho con el concierto”
La triunfadora de la noche, dedicó amablemente a enTomelloso.com unos minutos en medio de la vorágine de felicitaciones fotografía y autógrafos. Ainhoa Arteta nos relató que durante el concierto se había sentido como en su casa, señalando que el público es “muy receptivo y muy respetuoso con cada ciclo”. “He disfrutado muchísimo el concierto y he sentido ese feed-back del público”.
En cuanto al Teatro Municipal de Tomelloso “me ha gustado muchísimo, tiene una acústica maravillosa”, matizó que en España hay una red de teatros y auditorios, “puntera en Europa”, que “se debía de impulsar, dejando de lado muchas cuestiones anexas y poniéndonos a trabajar en el patrimonio cultural importante que tenemos”.
En cuanto al programa de este recital, solo de música española “en mis giras siempre la primera parte es música italiana, francesa o lieder y la segunda parte de música española, pero esta vez quería hacer hincapié en el repertorio español”. En ese sentido señaló que la filosofía es la de “sumar y no restar y creo que tenemos más cosas que nos unen de las que nos separan. En el ámbito cultural lo veo y lo siento así y la manera que tengo para poderlo expresar es haciéndolo en el escenario”.
El recital son emociones
Nos confesó que es distinto el calor del público en un recital que en una ópera, “llevo más de veinte años de recitalista, los recitales me han compaginado mucho el mundo de la ópera. El recital es un ‘tú a tú’ y además, se canta poesía. En la ópera vas con un personaje, en el recital vas con emociones”.
La presencia de Antón García Abril no era algo previsto “¡No, qué va! Ha sido toda una sorpresa. Creo que hemos tenido una gran suerte hoy en Tomelloso de tener a para mí, el mejor compositor español”.
El martes tiene la soprano un concierto en el Kursaal de San Sebastián de arias de ópera “ya entro otra vez en el mundo de la ópera” y marcha a Sao Paulo a hacer Tosca “hasta navidad”.