Los presidentes de las Asociaciones Provinciales de Taxistas (Manuel García), Transportes de Viajeros (Cándido Bravo), Transportes de Mercancías (Carlos Marín), CEAT (Miguel Angel Rivero) y Fecir (José Antonio Montero –coordinador general-), han ofrecido una rueda de prensa, en la que han denunciado la competencia desleal e intrusismo, que están sufriendo diferentes sectores, comenzando por los taxis, con la puesta en marcha de aplicaciones informáticas como Uber.
En primer lugar, el coordinador de Fecir, ha dicho que estos sectores integrados en dicha Federación Empresarial, cuentan con todo el apoyo de la misma, al igual que CEAT, que ha puesto énfasis en que siempre “que existe una laguna legal, los grandes perjudicados son los autónomos, que son mayoría en estos sectores los que nuevamente se sienten engañados”. Además, el presidente de CEAT ha comentado que no sólo es un problema de estos sectores, “sino de la propia seguridad de “nuestros hijos, familiares, amigos, que no saben en qué condiciones de seguridad en todos los aspectos se montan en vehículos que no tienen ningún tipo de cobertura legal”.
El presidente de la Asociación Provincial de Taxistas, Manuel García, dijo que los taxistas se sienten muy regulados (con más de 30 leyes), fiscalizados (un taxista necesita entre 50 y 70 euros cada día para empezar a cubrir su gastos) y muy abandonados por las administraciones. Ahora, según reseñó Manuel García, hay una nueva piratería, “llevamos con esta particular cruzada contra esta lacra desde que el taxi es taxi, acentuándose ahora más en época de crisis”. Los piratas siempre han existido, pero ahora con la llegada de estos nuevos “piratas informáticos”, una vez más desde la Administración no se ponen los medios adecuados para erradicarlos, aseguró.
Uber y otras plataformas APP, tan sólo han aprovechado la ambigüa normativa, “por lo que espero que todos juguemos con las mismas cartas”. En este sentido esperan a ver los resultados de las próximas reuniones para tomar las decisiones oportunas en un futuro cercano.
García señala que el sector del taxi legalmente establecido tiene que luchar contra una guerra de precios a la que nunca podrá hacer frente al no tener ninguna reglamentación ni cumplir nada al respecto los piratas de estas aplicaciones, “en igualdad de condiciones podríamos ser competitivos, destacando además que los precios de los viajes no los ponen los taxistas, sino que se acuerdan entre la administración, sindicatos, los profesionales y los consumidores”.
No es cuestión de poner puertas al campo sino a tener las mismas reglas de juego, incidió el presidente provincial de los Taxistas, a los que se unió en estas demandas los presidentes de Transportes de Mercancías y de Viajeros, que ya están comenzando a sufrir esta piratería, “podrían haber aprovechado las últimas leyes sobre transportes para incluir este tipo de hechos, pero no lo han hecho”, manifestó Marín.
Un ejemplo más de lo que se le pide a un taxista son la necesidad de presentar antecedentes penales o un seguro de responsabilidad civil para poder llevar viajeros, además de los impuestos, normativa, etc, por lo que la competencia es totalmente desigual, al no tener las mismas condiciones.
Cándido Bravo, presidente de la Asociación Provincial de Transportes de Viajeros, ha manifestado que esta situación de intrusismo se viene denunciado desde hace mucho tiempo, “se deja el uso de vehículos también en nuestro sector sin tarjeta de transportes por la propia Junta regional en cuanto, por ejemplo, la realización del transporte escolar”.
Para Bravo esta nuevas aplicaciones también están haciendo mucho daño al sector, “ya que el descenso en el número de viajeros de las líneas regulares es muy importante y eso que es un servicio público. El transporte de viajeros es un sector a punto de desaparecer, ya que los autobuses cuentan con más “gastos que ingresos”.
