El consejero de Hacienda del Gobierno regional, Arturo Romaní, ha asegurado, en referencia al dato de déficit de 2013, que “las cuentas de Castilla-La Mancha están en línea con el objetivo de estabilidad presupuestaria, aunque existen dos agujeros importantes del Gobierno anterior que hemos tenido que tapar”.
Se trata de la devolución de un impuesto nuclear cobrado durante 12 años, que ha sido declarado ilegal por el Tribunal Constitucional, y cuyo importe asciende a 212 millones de euros, así como el pago de 65 millones del IVA de la extinta Sociedad de Carreteras, que el anterior Ejecutivo nunca pagó.
Esas dos circunstancias excepcionales son las que, en palabras de Romaní, han influido en el déficit de Castilla-La Mancha, que finalmente ha cerrado en un 2,13 por ciento del PIB el pasado ejercicio, según los datos hechos públicos hoy por el Ministerio de Hacienda.
El secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, se ha referido también a esos dos hechos excepcionales e inasumibles, fruto de los errores de gestión del Gobierno anterior, y ha afirmado: “Excluyendo esas operaciones one-off, o hechos no recurrentes, Castilla-La Mancha hubiera estado en situación de cumplir con el objetivo de estabilidad fijado”.
Romaní ha incidido en que esas dos circunstancias excepcionales no tienen permanencia en el tiempo y no se repetirán este año, porque corresponden a ejercicios anteriores, por lo que “el Gobierno de Castilla-La Mancha tenía muy claro desde el principio que esos agujeros del PSOE no los tendrían que pagar los ciudadanos”.
De este modo, tal y como ha explicado el titular de Hacienda, estos dos hechos no llevarán aparejados recortes adicionales del gasto. “No habrá recortes para hacer frente a esos dos agujeros de la etapa socialista”, ha afirmado.
Así se refleja en el último Plan Económico Financiero de Castilla-La Mancha, aprobado por el Ministerio de Hacienda en el mes de diciembre, que incluye la posibilidad de incluir medidas excepcionales (como las dos partidas que han afectado al déficit de 2013), sin que esos hechos conlleven medidas de ajuste.
