Desde este miércoles y hasta el próximo 12 de enero se puede contemplar en la Posada de los Portales la exposición de pinturas de Forouk Tobal, Schkak. Sin duda una magnifica muestra pictórica la colgada en tan emblemático edificio y que se podrá admirar en estas fechas tan señaladas.
Durante el acto de inauguración, la concejala de cultura, María Dolores Coronado, señaló que esta muestra “Schkak nos ofrece una selección de sus obras más representativas. Donde el realismo y el hiperrealismo se ponen de manifiesto, mostrando con suaves pinceladas una gran intensidad del óleo sobre la tabla y el lienzo, dejando al descubierto la poesía de los objetos cotidianos”.
Farouk Tobal nació en el Kurdistán en 1947. Con apenas 11 años ingresó en la Academia de Bellas Artes de Alepo. “Allí recibió una formación clásica, igual que la que pudieron recibir los grandes maestros del pasado tan admirados por él”, señala Coronado. Estudió medicina en España, en Zaragoza, empezó a ejercer en 1975, combinando el arte y el trabajo.
La obra de Schkak fue conocida por el famoso crítico Gombrich, quien dejó escrita su admiración por la obra de Farouk, comparando sus dibujos con los de Leonardo da Vinci y aseverando la maestría de algunas de sus obras, enlazándolas con la tradición de la pintura española. “Nunca en la historia se había dado tal contraste entre calidad y éxito”.
La carrera del artista es ciertamente atípica, asegura Coronado, el autor nunca ha querido hacer promoción de su obra ni se ha presentado a certámenes, “pero eso sí, siempre se ha dedicado a su obra en cuerpo y alma, asumiendo el papel de mecenas de su propio arte”. Coronado ha querido agradecer al artista el detalle de exponer en nuestra ciudad, la tercera junto a Paris y Madrid, que ha tenido el privilegio de ver colgada su obra, animando a la ciudadanía a disfrutar de “esta excepcional muestra”.
El enlace del Ayuntamiento de Tomelloso con el artista ha sido a través del concejal de UPyD, José Luis Benito Andújar. Benito aseguró que el pintor “ha venido a la meca del realismo”, señalándole al artista que “este es el mejor escaparate para tu obra, en Tomelloso, donde amamos la pintura”.
El juicio crítico del arte
Schkak en su intervención ha mostrado su satisfacción por tener “parte de mis 60 años de pintura” expuestos en nuestra ciudad. “Me he agarrado al pincel y eso ha consolado mis penas”. Durante su discurso ha hablado de un tema recurrente para el artista: la apreciación del arte, el juicio crítico del arte. Bastante crítico con los cánones artísticos actuales, señala que “la cuestión es saber si una obra es una obra maestra, o una chapuza”, señalando que la apreciación del arte ha ido cambiando a lo largo de los tiempos, llegando a momentos de la historia en que los parámetros del arte han sido ciertamente bajos.
Ha destacado como cimas del concepto artístico la antigüedad clásica y la década de los 60 del siglo XVII, en la que se juntan “artistas geniales que nunca antes los hubo como Vermeer, Frans Hals, Jacob van Ruisdael y Rembrandt, que fueron condenados a la pobreza más absoluta y hoy sus trabajos son obras maestras para todos los tiempos”. Hablar de la época actual “es tedioso”, dado el contraste “entre el éxito y la calidad”.
“El artista debe guiarse por sus instintos y su talento, si lo tiene”, ha señalado en otro pasaje de su discurso. En nuestra época sabemos más de arte, “pero no conocemos el arte”, asegura. “La sensibilidad la hemos perdido en aras de sofisticaciones innecesarias que nos dejan ciegos ante el milagro que es una obra de arte”.
Para acabar Schkak, asegura que “una obra de arte, si realmente lo es, tanto nueva como vieja, a través del craquelado de la capa pictórica, exhala los anhelos del pintor, su sensibilidad, sus sufrimientos… Ahí hay un alma sensible y un talento”.
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