Esta mañana en la sala Francisco Carretero de Tomelloso, con la asistencia del primer teniente de alcalde, Javier Navarro, se ha presentado el libro “Bombos y Chozos de La Mancha”, editado por la Asociación Foro Castellano de Tomelloso. En su composición han participado una decena de autores, incluido el difunto Lorenzo Sánchez López. La coordinación del proyecto la han llevado a cabo Francisco Javier Escudero, Juan Luis Segura y Vicente Aparicio.
Javier Navarro ha dado las gracias en nombre del Ayuntamiento a este interesante y documentado libro que pone en valor estas construcciones, tan particulares de Tomelloso y de la Mancha en general.
Este libro da inicio a una nueva etapa de la asociación Foro Castellano de Tomelloso. Hasta ahora había editado la revista La Mancha de Vejezate y a partir de ahora inician la edición de guías. Buscando mayor difusión, explica Francisco Javier Escudero, editan en Guadalajara.
Es una obra colectiva muy interesante, que busca abrir puentes a otros lugares, explica Escudero. El libro consta de siete capítulos y en el acto de hoy estaban presentes, Vicente Aparicio, de Campo de Criptana; Isabel Duque, directora del Museo de Historia de Pedro Muñoz, que ha participado con dos artículos, sobre los bombos y chozos de Pedro Muñoz y sobre los chozos de Tébar, en Cuenca y Luis Moreno Gento, que ha participado con un capítulo sobre Villarrobledo. Para Francisco Javier Escudero, el volumen que hoy se presenta supone una revitalización de los bombos y chozos que ya tuvieron un importante auge y repercusión en décadas pasadas.
Vicente Aparicio señala que en el término de Críptana se dan los chozos en el norte y los bombos en el sur, en la zona que linda con Tomelloso. Para Aparicio, el chozo es la iglesia románica y el bombo es la catedral gótica. Isabel Duque señala que ella ha hecho una aproximación a los chozos de pastor de Pedro Muñoz, pero el grueso de su investigación está centrada en eso tipo de construcciones en el pueblo de Tébar, en la provincia de Cuenca. Luis Moreno Gento censó los bombos del término de Villarrobledo, uno de los mayores de la zona de la Mancha, encontrándose un centenar de ellos. En el vecino pueblo de Albacete a esas edificaciones se les denominan bombo, aunque con dos tipos de construcción.