jueves, 4 diciembre, 2025

La cooperativa Virgen de las Viñas respalda la instalación de una planta de biometano en Tomelloso

El alcalde destaca los beneficios ambientales y económicos del proyecto, mientras que Rafael Torres subraya que dará solución a problemas actuales de gestión de residuos

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La planta de biometano que una empresa ha propuesto instalar en Tomelloso, con una inversión prevista de 25 millones de euros y a 15 kilómetros del casco urbano, continúa avanzando en su fase de análisis. El proyecto, que aspira a ser declarado de interés prioritario si el Ayuntamiento firma el convenio solicitado, tiene como objetivo valorizar residuos orgánicos del sector agroalimentario local, y se enmarca dentro de un proceso de implantación similar en otras localidades cercanas.

Durante una visita institucional a la cooperativa Virgen de las Viñas, el alcalde Javier Navarro mantuvo un encuentro con su presidente, Rafael Torres, dentro de una ronda de contactos con entidades agrarias de la ciudad. La reunión sirvió para abordar las implicaciones del proyecto y recabar opiniones antes de que el Consistorio se pronuncie oficialmente.

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Navarro explicó que el objetivo es ofrecer una salida viable a los residuos que actualmente generan problemas a las cooperativas, como las vinazas, el agua de limpieza de depósitos o los productos no comercializables. “Estamos hablando de reutilizar aquello que hoy supone una preocupación para nuestras cooperativas, como es el caso de esta o de Santiago Apóstol”, señaló. Además, destacó que el tratamiento sería gratuito para las cooperativas, lo que supondría un ahorro económico y una mejora medioambiental.

El regidor defendió que este tipo de plantas permiten no solo reducir la carga contaminante en las depuradoras, sino también obtener fertilizantes certificados útiles para el fertirriego, en línea con las normativas ambientales que prepara el Gobierno regional. “No estamos hablando de una cuestión opinable, sino científica, y en Tomelloso vemos beneficios claros para nuestros sectores más importantes”, afirmó.

Sobre la polémica que se ha generado en otras localidades, Navarro fue claro: “Hay que romper mitos. Esta planta no implica la llegada de residuos de fuera ni un aumento del tráfico pesado urbano”. Insistió en que la planta estaría conectada a la red de Enagás y que su acceso sería por la carretera de Pedro Muñoz, sin afectar al casco urbano.

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Rafael Torres: “Es una buena idea que nos va a beneficiar a todos”

Por su parte, Rafael Torres, presidente de Virgen de las Viñas, mostró su apoyo al proyecto tras escuchar las explicaciones del alcalde. “Me parece una buena idea y felicito al alcalde por la iniciativa. Creo que cuanto antes se lleve a buen fin, mejor”, declaró. Explicó que la cooperativa se encuentra actualmente “apurada con su depuradora de aguas residuales” y que esta planta permitiría “descargarla y aportar subproductos procedentes de la uva”.

Torres también destacó que el proyecto no solo beneficiará a Virgen de las Viñas, sino también a otras empresas agroalimentarias de Tomelloso que carecen de depuradora, evitando así futuras ampliaciones de infraestructuras y ayudando a cumplir las nuevas exigencias medioambientales.

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Un proyecto ligado al sector agroalimentario local

La planta de biometano estaría situada a 15 kilómetros del casco urbano de Tomelloso, dentro del término municipal. Su función sería reutilizar subproductos orgánicos generados por las cooperativas, como vinazas, aguas residuales o productos agrícolas no comercializados, para convertirlos en biogás y fertilizantes.

Según explicó el alcalde, con los residuos que se generan actualmente en Tomelloso habría capacidad para tres plantas de este tipo, aunque en este caso se plantea únicamente una. El proyecto contempla también un convenio social valorado en 100.000 euros, la creación de hasta 30 empleos directos, y la posibilidad de que empresas locales participen en su construcción, lo que reforzaría el impacto económico en la ciudad.

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La decisión definitiva dependerá de que el Ayuntamiento firme el convenio y de que el proyecto supere todos los trámites legales, incluidos los informes urbanísticos y medioambientales tanto municipales como autonómicos,. “Si no cumple con la normativa, no se puede implantar. Pero si cumple, ninguna administración puede frenarlo”, concluyó Javier Navarro.

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