Desde el pasado mes de marzo la ICRDO La Mancha puede certificar sus vinos en un laboratorio sensorial propio acreditado por ENAC, siendo el primero de Castilla-La Mancha y uno de los pioneros de España.
El Consejo Regulador La Mancha ha obtenido la acreditación de su laboratorio sensorial u organoléptico (panel de cata) para todo tipo de vinos, tras un ingente trabajo de varios años, ya que como indica la responsable del propio panel, Saray Marco, “comenzamos a desarrollar el método de ensayo en enero de 2017 y desde entonces no hemos parado hasta obtener la acreditación en marzo de 2020. Este proceso ha supuesto realizar una rigurosa selección y entrenamiento de los catadores, así como la cualificación de los mismos una vez validación del método.”
Dicha acreditación ha llegado recientemente de manos de ENAC, la Entidad Nacional de Acreditación, tras un riguroso proceso de documentación, seguimiento y cualificación de su panel de catadores. En definitiva, un largo proceso que duró unos 18 meses donde lo más difícil, en palabras de Marco, “fue el acoplamiento entre el entrenamiento de catadores y el desarrollo del método. Actualmente, disponemos de 15 catadores, a los cuales les queremos dar las gracias por la implicación que han tenido durante todo el proceso.”
Lamentablemente, esta acreditación ha llegado en plena pandemia de Covid-19, lo que ha obligado al laboratorio organoléptico a paralizar temporalmente su actividad, estando prevista que la retome para finales del mes de mayo, tras haberse creado un nuevo protocolo que ha intensificado la seguridad e higiene, incluyendo más medidas prevención para que los catadores puedan desarrollar adecuadamente su trabajo sin asumir riesgos.
¿Qué supone la acreditación del laboratorio organoléptico del Consejo Regulador La Mancha?
En primer lugar, se asegura una mayor profesionalidad del método de cata y, en definitiva, conlleva una refrendación técnica y documental que supone un espaldarazo a los métodos de control en la trazabilidad y certificación final del producto por parte del laboratorio organoléptico del Consejo Regulador, garantizando la competencia técnica y el rigor en los resultados de las muestras analizadas.
Según Saray Marco, “estar acreditado por ENAC en la norma UNE-EN ISO/IEC 17025:2017 supone el reconocimiento de un organismo cuyos informes de valoración están reconocidos en más de 90 países. El organismo de acreditación se encarga de comprobar mediante evaluaciones independientes e imparciales, competencia técnica de los laboratorios en la norma UNE-EN ISO/IEC 17025, dicha norma está reconocida y es utilizada para evaluar laboratorios de todo el mundo. Por ello cualquier empresa que disponga de una acreditación lleva detrás un riguroso trabajo.”
Protocolo de cata digitalizado
Además de contar con hasta 30 sesiones de entrenamiento previas, el actual panel de catadores se encuentra en continúa formación, evaluando su calibración en cada sesión para una adecuada aptitud de juicio en el análisis sensorial de los vinos.
Por ello, el proceso de cata responde a las pautas normales, aunque con variaciones significativas que tratan de restringir al máximo las desviaciones de los propios catadores, minimizando así las interferencias subjetivas de aquellos.
También se ha diseñado un programa informático específico con el que los catadores evalúan los vinos mediante dispositivos digitales, lo que permite, que una vez finalizada la sesión de cata, se tengan de forma inmediata los resultados de la evaluación, así como el control de calidad que se realiza durante la sesión.
Además, es importante destacar que, aunque inicialmente está pensado para el análisis de muestras de la Denominación de Origen La Mancha, al ser la acreditación del panel para vinos en general se podrán catar vinos de otras indicaciones, como Vinos de La Tierra o Varietales, e incluso de otras denominaciones de origen.