El Gobierno de Castilla-La Mancha ha pedido al Ministerio de Agricultura que, en el sector del vino, se disminuyan los rendimientos por hectárea y se aumenten los rendimientos de los subproductos, «para disminuir la producción efectiva de vino en esta campaña» y reforzar así la apuesta por la calidad.
«Queremos afrontar la vendimia con una apuesta por la calidad; en Castilla-La Mancha queremos ir a un cambio de modelo radical en el sector del vino y aprovechar la circunstancia actual, en la que el Gobierno de España ha propuesto medidas concretas para mejorar la situación del sector y la apuesta por calidad», ha destacado el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, en rueda de prensa.
Según ha señalado, esa propuesta, realizada por la Comunidad Autónoma en la reunión celebrada este mismo lunes con el Ministerio para debatir las propuestas de las autonomías a las medidas extraordinarias frente al impacto del COVID-19 en el sector vitivinícola, ha contado «con el acuerdo unánime del sector en Castilla-La Mancha», ha explicado Martínez Arroyo, que se ha mostrado «especialmente orgulloso» por este hecho.
Además, ha explicado que hay «algunas medidas de mercado, como la destilación de crisis y el almacenamiento privado, que se van a poner en marcha» y ya se está «trabajando con el Gobierno de España en ello» desde el «planteamiento de la solidaridad regional».
En este contexto, el consejero ha avanzado que en la región se va a poner en marcha una línea específica para mantener el viñedo de secano, que va en la dirección de la apuesta por la calidad con distintas líneas en las que está trabajando su departamento y que espera que sirvan «para relanzar con más fuerza un sector que es imprescindible» para el desarrollo de Castilla-La Mancha».
Además, ha indicado que el Gobierno regional está trabajando con el sector vitivinícola, las organizaciones agrarias, cooperativas, la industria transformadora y los destiladores de vino para «alcanzar una posición común» frente a la situación actual. Todo ello, pese al dato «muy positivo» que revela que la región ha incrementado sus ventas un 25% en el canal de distribución alimentaria en España respecto al mes de abril del año anterior.
«El sector está llegando a los consumidores con incrementos impensables hace unos meses», ha precisado Martínez Arroyo, que ha subrayado que la región sigue «vendiendo muy bien» su vino embotellado y de Denominación de Origen.
