Los vecinos del Barrio San José Obrero de Tomelloso están de enhorabuena. El barrio se vistió de fiesta este domingo para la esperada inauguración de la ampliación de la ermita de su patrón, unas obras que la junta directiva del barrio llevaba demandando desde hace años y que el actual equipo de gobierno se comprometió a acometer, como recordó durante el acto la alcaldesa de la ciudad, Inmaculada Jiménez, encargada de descubrir, junto al presidente de la asociación de vecinos, Ángel Montejano, la placa conmemorativa de la señalada fecha, que pasará a la historia del barrio y de la ciudad de Tomelloso.
Además de la ampliación de la ermita, que es ya una realidad, la alcaldesa anunció que este inmueble, que sorprendentemente no aparecía en el inventario de propiedades municipales será ahora catalogado como bien de interés municipal. Es “incomprensible”, señaló Jiménez, que la ermita no estuviera en el inventario municipal, “porque cualquier vecino de Tomelloso que haya pasado por aquí siempre ha tenido como referente esta capilla de San José Obrero, que los vecinos construyeron con mucho esfuerzo, mucho sacrificio y mucho orgullo y que sigue ahí presente para que todo el mundo pueda disfrutarla”.
Además de ser inventariada, la ermita será incluida en las guías turísticas de la ciudad porque, señaló Jiménez, “es un punto que puede ser de interés para el visitante, para el turista y para los ciudadanos de Tomelloso”.
La alcaldesa avanzó también que el equipo de gobierno municipal, que ya remodeló la plazoleta al inicio de la legislatura, va a seguir trabajar para poner en valor el barrio, de forma que la ampliación de la capilla llevará aparejadas otras actuaciones como un proyecto de eficiencia energética.
La ampliación de la ermita ha sido posible gracias a una subvención de nominativa de 25.000 euros, concedida al Ayuntamiento por la Diputación Provincial de Ciudad Real, para este fin, y permitirá a los vecinos contar con más espacio para la celebración de sus fiestas patronales y otros eventos a lo largo del año, así como permitir mayor comodidad en labores cotidianas como vestir al santo.
Jiménez destacó el trabajo de la junta directiva de la Asociación del Barrio, para dotar a éste de actividad, hacer que crezca y motivar a los vecinos y agradeció la labor del área municipal de Urbanismo y de los servicios técnicos municipales que ha permitido que el proyecto de ampliación salga adelante.
“Nos habría gustado”, dijo la alcaldesa, “que esta inauguración hubiese llegado antes, porque las obras concluyeron hace ya unos meses, pero los diferentes procesos electorales durante los que está prohibido celebrar este tipo de inauguraciones lo ha impedido”. En cualquier caso, la fecha final, el 15 de diciembre, afirmó, “es una fecha muy bonita porque es la víspera de la Navidad, un momento especial para encontrarnos con los vecinos y poner en valor las cosas que se han hecho en el barrio”.
El presidente de la Asociación de Vecinos, Ángel Montejano, expresó su agradecimiento al equipo de gobierno y en especial a la alcaldesa, “por su humanismo y su trabajo codo a codo con nosotros”, para dar respuesta a las demandas del barrio y poder celebrar lo que definió como “un día histórico y simbólico”.
Las obras realizadas, apuntó, han dado respuesta al objetivo que buscaban de “ganar espacio y amplitud y que San José contara con un lugar más grande para la celebración de sus fiestas patronales y otros eventos”.
La capilla, recordó, fue remodelada por primera vez en el año 1982 y representa la memoria de aquellos vecinos que entonces aportaron su granito de arena para que el patrón del barrio, cuya imagen fue donada por Claudio Moraleda en el año 1960, tuviera este espacio que con las obras acometidas ahora ha triplicado sus dimensiones.
El año que viene se celebrará el 50 aniversario de su construcción y el barrio trabaja ya, según adelantó el presidente de la asociación de vecinos, en los actos de celebración.