El secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page ha lamentado que la ministra de Empleo, Fátima Báñez, junto a la presidenta de Castilla-La Mancha y secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, venga a Toledo a «certificar la defunción» del pacto sobre las pensiones.
En declaraciones a los medios en el transcurso del Comité regional de Castilla-La Mancha que se celebra este sábado, el líder de los socialistas en la región ha asegurado que Báñez viene a la capital a defender el sistema de pensiones cuando su partido «ha dinamitado» el Pacto de Toledo.
«Teníamos un pacto y lo han roto, lo han dinamitado», ha criticado García-Page, quien ha augurado que en los próximos meses caerá «una espada de Damocles» sobre los pensionistas españoles, y en concreto, sobre los de Castilla-La Mancha.
«Prometieron que no tocarían las pensiones y vaya si las han tocado. Los pensionistas van a experimentar una caída prolongada en el tiempo de su capacidad de renta. Es una rebaja en diferido», ha asegurado García-Page.
EL PSOE DISPUESTO A NEGOCIAR
De este modo, ha mostrado el «el claro rechazo» de los socialistas hacia la política de pensiones del Gobierno, aunque ha manifestado que el PSOE está dispuesto a actualizar este pacto, pero «cambiando las condiciones» que ha planteado el presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, y que suponen «un hachado en el tiempo» para los pensionistas.
«El PSOE quiere que todo el mundo sepa que lo que han hecho es dejar en saldos el Pacto de Toledo, un pacto que ofrecía estabilidad al sistema de pensiones en el marco de estabilización de cada gobierno», ha manifestado el líder de los socialistas.