La presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias de Castilla-la Mancha (FEMP), Mayte Fernández, ha anunciado este martes que planteará a la comisión ejecutiva de este organismo un incremento presupuestario para el ejercicio 2016 en materia de formación y comunicación con los ayuntamientos más pequeños, «que son los que menos recursos tienen».
Durante un encuentro con los medios de comunicación de Puertollano, y a preguntas de los medios, Fernández ha explicado que la cantidad dedicada a este fin está «sin cuantificar», ya que aún no está elaborado el borrador presupuestario, pero que en todo caso uno de los «principales objetivos» de la FEMP en 2016 será «potenciar la comunicación directa» con los consistorios más pequeños y la formación de los empleados municipales, concejales y alcaldes.
Así, y entre otras acciones, se realizarán encuestas para detectar las necesidades de estos ayuntamientos y elegir los cursos de formación que se impartirán.
Fernández llevará este mensaje a la reunión de la comisión ejecutiva de la FEMP que se celebrará el próximo 26 de enero y en la que planteará el nuevo diseño de propuesta presupuestaria.
La también alcaldesa de Puertollano ha señalado que la FEMP recobra así el pulso de trabajo después de superar una «dinámica un poco más tranquila, por acuerdo de todos» para no interferir en el pasado proceso electoral.
CATALUÑA
Por otro lado, Mayte Fernández ha valorado la situación política en Cataluña y su posible repercusión en los municipios castellano-manchegos tras el acuerdo entre Junts pel Sí y la CUP que ha posibilitado la investidura como presidente de Carles Puigdemont.
En este sentido ha señalado que habla «como Mayte Fernández» porque la postura de los ayuntamientos sobre esta cuestión aún no ha sido tratada en el seno de la FEMP-CLM, «si bien podrá ser un tema importante».
No obstante, ha subrayado que para los ayuntamientos de Castilla-La Mancha «lo que está claro es que la estructura organizativa del país esté equilibrada y tranquila».
«Los procesos de ruptura no nos favorecen para nada y menos en Castilla-La Mancha», ha insistido, al tiempo que ha mostrado su confianza en que «todo esto al final se tranquilice y haya estabilidad para poder gestionar de verdad los problemas que tienen los ciudadanos». «Creo que la mayoría de los ayuntamientos castellano-manchegos compartirán conmigo esta reflexión», ha concluido.