El presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha explicado este miércoles que el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, no ve «imposible» llegar a un acuerdo con Podemos y Ciudadanos para formar gobierno. Según ha dicho, el líder de los socialistas tiene «un planteamiento claramente constructivo» y no está dispuesto a «tirar la toalla».
Así lo ha señalado el presidente castellano-manchego en declaraciones a los periodistas en Ferraz, después de reunirse durante alrededor de una hora con Sánchez, en el marco de la ronda de conversaciones que el líder del PSOE está teniendo con todos los dirigentes territoriales de su partido antes del Comité Federal del próximo sábado.
A su llegada, García-Page ha explicado que lo «realmente constructivo», a su juicio, sería llegar a un acuerdo con Podemos y con Ciudadanos y, después, ha explicado que el secretario general «no lo ve imposible». «Ve que hay un espacio para poder llegar a un acuerdo», ha explicado, tras su encuentro.
El presidente de Castilla-La Mancha ha explicado que ha visto a Sánchez «en un planteamiento claramente constructivo para el país» y «no está en disposición de tirar la toalla como Rajoy». «Si fracasamos en un intento de formar gobierno, que no sea por escondernos, sino dando la cara», ha remachado.
A su juicio, los socialistas deben dejarle claro a los españoles que tienen «un planteamiento de cambio progresista, sin discutir para nada la soberanía nacional ni el planteamiento constitucional».
«El modelo del PSOE es un modelo muy claro y a Pedro Sánchez lo veo con ganas de intentar llegar a acuerdos, pero sabiendo también que los españoles no tolerarían un acuerdo de cualquier manera o a cualquier precio», ha recalcado.
EL OBJETIVO: UN GOBIERNO «RAZONABLE, ESTABLE Y PREVISIBLE»
Y se ha mostrado convencido de que Sánchez así lo cree. «Lo que tengo muy claro es que le gustaría coger la Presidencia del Gobierno, pero no a cualquier precio y no hurtándosela al PP», ha explicado. Según ha dicho, el líder del PSOE va a «intentar ejercer su responsabilidad», si el PP «reniega» de ella, pero con el objetivo de «tener un gobierno razonable, estable, previsible, que dé confianza».
Según ha dicho, en la conversación no han hablado de la posición de Felipe González a favor de que el PSOE se abstenga para permitir un gobierno del PP con Ciudadanos. Eso sí, ha defendido que el expresidente está hablando desde el punto de vista de una política de Estado y no de gobierno y ha asegurado que coincide con él en que sería «imperdonable» no llegar a un acuerdo con el PP si se buscan «acuerdos constitucionales».
Otra cosa, ha dicho, es el Gobierno y ahí la abstención del PSOE es «tan implanteable» como que el PP no vote en contra de una investidura de Pedro Sánchez.