El programa Tándem, una iniciativa innovadora que ha combinado formación en digitalización con la inserción laboral de personas con discapacidad intelectual, ha llegado a su fin en Tomelloso tras 15 meses de intenso trabajo. Durante este tiempo, los participantes han llevado a cabo una labor fundamental en el Ayuntamiento, digitalizando más de 7.000 documentos históricos, entre ellos programas de festejos desde 1930, fotografías y vídeos antiguos.
El acto de clausura ha sido un momento de emociones encontradas, con discursos que han reflejado el impacto positivo del proyecto tanto en los alumnos como en la comunidad. Autoridades locales y responsables de las entidades implicadas han destacado los logros alcanzados y han subrayado la necesidad de dar continuidad a este tipo de iniciativas que fomentan la inclusión laboral en un entorno normalizado.
Raimundo Alcaide, presidente de Laborvalia, ha puesto en valor el carácter pionero del programa, destacando que es uno de los primeros en España en unir digitalización y discapacidad intelectual. «En principio no parece que puedan combinar muy bien, pero hemos demostrado que sí es posible», ha afirmado, resaltando el esfuerzo de los alumnos y docentes. También ha querido agradecer el apoyo del Ayuntamiento de Tomelloso, que cedió un espacio privilegiado para el desarrollo del proyecto. «Los trabajadores municipales han podido ver de primera mano que las personas con discapacidad pueden desempeñar un trabajo de gran calidad, y los propios participantes han demostrado sus habilidades».
Más allá del éxito del programa, Alcaide ha recordado que el verdadero reto comienza ahora: la inserción laboral de los participantes. «Tenemos personas formadas, tenemos los equipos y los profesionales que los han acompañado, pero ahora nos queda conseguir empleo para ellos. Hay un nicho de trabajo importantísimo en la digitalización de documentos y ellos están perfectamente capacitados».
Bernabé Blanco, director de AFAS, ha coincidido en que este proyecto ha sido un ejemplo de inclusión real. «Han trabajado en un ambiente completamente normalizado, han salido a tomar café, han formado parte del día a día del Ayuntamiento. No puede haber mejor escenario para demostrar que la inclusión es posible y necesaria». Blanco ha agradecido la implicación del Ayuntamiento desde el primer momento, remarcando que «este tipo de iniciativas no pueden quedarse en algo puntual, sino que deben continuar».
El alcalde de Tomelloso, Javier Navarro, ha mostrado su orgullo por el impacto del programa, no solo en términos de formación y digitalización, sino también en lo que respecta a valores y convivencia. «Podríamos hablar de las más de 7.000 digitalizaciones que han realizado, pero lo realmente importante es el ejemplo de trabajo en equipo, esfuerzo y superación que nos han dado».
Navarro ha insistido en que este no debe ser un punto final, sino un nuevo comienzo. «Debe ser un toque de atención para que las administraciones públicas amplíen su oferta laboral a todas las capacidades. Estos chicos han demostrado que aquello que parecía difícil, o incluso imposible, se puede lograr».
El alcalde también ha destacado el compromiso de los trabajadores del Ayuntamiento, que han colaborado activamente con los participantes, y ha subrayado la importancia de seguir apostando por este tipo de programas. «Nosotros hemos aprendido tanto de ellos como ellos de nosotros. Ha sido una experiencia enriquecedora para todos».
Con el cierre del programa, el objetivo ahora es garantizar que los participantes puedan acceder a oportunidades laborales que les permitan seguir desarrollando las habilidades adquiridas. La digitalización de archivos históricos ha demostrado ser un campo de empleo viable, y las entidades implicadas seguirán trabajando para que esta formación se traduzca en contratos reales.



