Tal como informábamos esta mañana, tres agricultores de Tomelloso, Sergio Parra, Eusebio Díaz y Mario Picazo, se han desplazado hasta Aldaia, Valencia, con sus tractores equipados para colaborar en las labores de limpieza tras la devastadora riada que afectó a la localidad. Con equipos básicos de protección y mucha disposición, se han unido a las brigadas de Protección Civil, Guardia Civil y otras instituciones para hacer frente a la acumulación de barro y escombros que la crecida dejó a su paso.
Sergio Parra, uno de los voluntarios, explicó en conversación telefónica con enTomelloso.com, que han encontrado una gran organización en el puesto de mando de Aldaia, donde se coordina el despliegue de todas las unidades y se ofrece apoyo logístico a los colaboradores. “Aquí tienen un destacamento muy grande de Protección Civil, están muy bien preparados, y nos han facilitado camas, duchas y comida”, indicó. En cuanto a la comida, Parra agregó que las provisiones han sido suficientes y variadas, y que incluso cocineros locales han contribuido a la iniciativa, “hay una mesa muy larga donde nos dan de comer a todos los que estamos ayudando”.
En cuanto al trabajo en el terreno, los agricultores se han concentrado en áreas donde sus tractores pueden operar mejor que las máquinas grandes, accediendo a zonas más estrechas. “Con nuestras cuchillas y palas vamos apartando el barro y los trastos que la gente ha sacado de sus casas. Nos encontramos de todo: juguetes, archivadores, cubos de pintura… Es increíble todo lo que arrastró el agua”, relató Parra.
La situación en Aldaia es compleja, y aunque muchos vecinos ayudan en las labores de limpieza, la actividad está en plena convivencia con el tráfico y la vida diaria. “A veces se cruzan coches y personas sin cuidado mientras estamos con las máquinas; por eso tenemos que estar atentos, no puedes distraerte ni un segundo”, comentó el agricultor.
El equipo de Tomelloso permanecerá en la localidad varios días, hasta que el fin de semana se dispongan a regresar a casa. Durante su estancia, están usando sus propios equipos de protección, conscientes de los riesgos de salud en una zona con alta humedad y materiales de desecho. Parra resaltó la colaboración de todos los presentes, desde empresas privadas que no están cobrando por sus servicios hasta organismos oficiales de otras comunidades que también han acudido en ayuda de los vecinos de Aldaia.