El consejero de Educación, Cultura y Deportes del Gobierno de Castilla-La Mancha, Amador Pastor, ha dado cuenta de los detalles del banco de libros de texto anunciado por el presidente regional, Emiliano García-Page, con el que se quiere garantizar la gratuidad total de este recurso para todos los alumnos de la región, apuntando que con la entrada en vigor de este sistema a partir del próximo curso se cubrirán todos los cursos a excepción de primero y segundo de Primaria, ya que el material es de un solo uso.
En rueda de prensa, ha detallado que este banco de libros «está destinado a todo el alumnado de enseñanzas obligatorias y Bachillerato de centros públicos».
Las familias que quieran formar parte de este sistema a partir del próximo curso tendrán que entregar la totalidad de los libros de texto utilizados en el presente curso para poder recibir los del próximo en el corto plazo. Si faltara algún libro del lote completo, habrá de compensar con una aportación económica que, en todo caso, será simbólica.
PROYECTO COOPERATIVO
Profundizando en el proyecto, ha desgranado su funcionamiento apuntando que se trata de un sistema de préstamo en el que las familias dejarán sus libros para beneficiarse a futuro de otros préstamos.
Una vez que las familias depositan al finalizar el curso los libros de texto de forma voluntaria, todos los materiales serán dotación de estos bancos de libros para ponerlos a disposición de otros alumnos.
Tendrán cabida todos los libros «siempre y cuando cumplan las condiciones» para seguir siendo utilizados.
Los libros de un solo uso de primer y segundo curso de primaria no tendrán cabida, si bien se mantienen vigentes por parte del Gobierno las ayudas y becas para su adquisición.
En el caso de que haya alumnos que no hayan aportado libros o que vengan por primera vez, se establecerá un precio simbólico que le permitirá, a partir de la aportación económica, participar «en las mismas garantías» para beneficiarse de este sistema de libros.
En todo caso, ha avanzado que la mala gestión, el deterioro o el extravío de libros obligará a los beneficiarios a compensar económicamente su reposición.
Además de todo ello, habrá una plataforma informática de gestión con el inventario de los libros y sus usuarios potenciales, y en todos los centros se creará una comisión rectora del banco de libros para velar por su funcionamiento.
Pastor ha querido sacar pecho por el esfuerzo del Gobierno autonómico, con hasta 22,5 millones de euros en los tres últimos años para ayudar a la adquisición de libros.