La estabilidad del inicio de esta semana dará paso a una segunda mitad marcada por las precipitaciones en el norte y este peninsular, acompañada de un descenso de las temperaturas, que será más acusado este viernes, cuando se espera que los termómetros bajen hasta 10 grados centígrados (ºC) con respecto a lo normal para esta época del año, según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
Así, como consecuencia de la llegada de vientos húmedos del norte y del aumento de la inestabilidad atmosférica, estos próximos días estarán marcados por las precipitaciones en el extremo norte de la Península, según ha explicado el portavoz de AEMET, Rubén del Campo.
El portavoz ha precisado que estas lluvias sobre todo se producirán en el área cantábrica y los Pirineos, zonas donde podrían llegar a ser persistentes. También se esperan chubascos en Cataluña y otras zonas del este de la Península, así como en Baleares, que localmente podrían ser intensos en la comunidad catalana y estar acompañados de granizo.
Además, con la llegada de estos vientos del norte, que son más fríos, se va a producir un descenso térmico y una bajada de las temperaturas desde este miércoles en buena parte de España, con la que se «pondrá fin a un largo episodio cálido de prácticamente un mes de duración», en el que los termómetros han alcanzado valores muy elevados para la época del año, sobre todo en la última semana de abril.
En este punto, el portavoz ha recordado que, durante cinco días consecutivos del mes pasado -del 25 al 29 de abril- se batieron récords ya que fueron «los más cálidos para esas fechas en España desde, al menos, 1951».
Del Campo ha puntualizado que el tiempo será más frío de lo normal en la mitad norte y, sobre todo, en el tercio norte donde este viernes los registros diurnos podrían estar entre 5 y 10ºC por debajo de lo habitual para las fechas e incluso podría verse nieve en las montañas, a partir de unos 1.400 o 1.500 metros estos días. El portavoz de AEMET ha precisado que en el resto del país las temperaturas serán más propias para estas fechas.
De este modo, para miércoles lo más destacado serán las lluvias en el extremo norte peninsular, con algunas tormentas localmente intensas en el nordeste de Cataluña. Podrían caer algunos copos en los Pirineos a partir de 1.500 metros y se notará ya un descenso térmico en la Península y Baleares.
Para este jueves no variarán demasiado las temperaturas, aunque bajarán un poco más en el área mediterránea. Por ejemplo, en Córdoba y Sevilla todavía superarán los 32 ó 33ºC, mientras que en Vitoria o Pamplona se quedarán en torno a los 15ºC.
Este 11 de mayo se esperan pocas lluvias en España, salvo en el Cantábrico, donde las precipitaciones podrían ser persistentes, así como en Cataluña, donde habrá chubascos, sobre todo en el norte de la comunidad, que podrían ser intensos y estar acompañados de granizo. También se esperan chubascos en la Comunidad Valenciana y el viento del norte se dejará notar en el nordeste de la Península, donde soplará con fuerza.
El viernes, los vientos húmedos del norte, junto con un aumento de la inestabilidad atmosférica, seguirán dejando nubosidad abundante y precipitaciones en el área cantábrica que, en el litoral vasco, serán persistentes y en los Pirineos podrán ser en forma de nieve a partir de unos 1.500 metros.
Se esperan además lluvias tormentosas en Cataluña y en el resto del este peninsular crecerán las nubes de evolución, que podrán dejar caer chubascos tormentosos, sin descartar que alguno de estos chubascos en el este de la península pueda ser localmente intenso. También podría haber chubascos en el archipiélago balear mientras que en el resto del país los cielos estarán más abiertos.
Las temperaturas volverán a descender el viernes y, aunque en algunos puntos se podrán alcanzar los 30ºC, «en el tercio norte el ambiente ya será claramente frío para esta época del año». «En ciudades como Soria, Pamplona o Burgos, a duras penas se llegará a los 15 grados o serán registros entre 5 y 10ºC inferiores al promedio normal para la época en esas ciudades», ha añadido Del Campo.
De cara al fin de semana, ha señalado que el sábado continuará una situación similar, con precipitaciones en el extremo norte de la Península, que serán persistentes en la costa vasca y norte de Navarra, mientras que el domingo continuarán las lluvias en el extremo norte y, aunque podrían caer de nuevo chubascos en el este y Baleares, serán más dispersas y débiles que las del día anterior.
En el resto del país, sobre todo en la mitad occidental, los cielos estarán más despejados y las temperaturas se recuperarán durante el fin de semana en la mayor parte del territorio, con un ambiente que, en general, se podrá calificar de «normal para esta época del año o si acaso algo más fresco todavía por la noche en la mitad norte peninsular, fundamentalmente».
En las Islas Canarias, este miércoles será protagonista el viento del este y nordeste, con rachas fuertes o muy fuertes generalizadas en el archipiélago y que causarán mal estado de la mar. Además, las temperaturas serán altas y en zonas del sur de Gran Canaria y Fuerteventura se podrán superar incluso los 32ºC.
El jueves continuará el viento intenso, sobre todo, en las islas occidentales y también las altas temperaturas pero de cara al viernes y el fin de semana también habrá un descenso de las temperaturas, aunque luego se normalizarán. El viento seguirá soplando con fuerza durante el fin de semana aunque quizás no con tanta fuerza como en días previos.
EL PRIMER CUATRIMESTRE DE 2023, EL MÁS SECO DE LA SERIE HISTÓRICA
Del Campo también ha analizado la situación existente en España ya que, entre el 1 de octubre de 2022 (fecha en la que comenzó el actual año hidrológico) y el 8 de mayo de 2023, se han recogido en España 349 litros por metro cuadrado, cuando lo normal para ese periodo son 479 litros por metro cuadrado.
En este contexto, abril de 2023 fue el mes de abril más seco de toda la serie histórica mientras que, lo largo del primer cuatrimestre de 2023 (entre los meses de enero, febrero, marzo y abril), se han recogido en España 112 litros por metro cuadrado, cuando lo normal en ese primer cuatrimestre del año son 250 litros por metro cuadrado.
De este modo, Del Campo ha reiterado que este primer cuatrimestre del año es el más seco de toda la serie histórica desde, al menos, 1961, superando al primer cuatrimestre de 2005, que hasta ahora era el más seco, con 125 litros por metro cuadrado.
De este modo, las lluvias están un 54 % por debajo de lo normal y el mes de mayo, en sus ocho primeros días, ha dejado en el conjunto de España «tan sólo 3 litros por metro cuadrado, esto es aproximadamente un 75 % menos de lo normal».
«Y durante los próximos días tampoco esperamos que las precipitaciones vayan a caer de forma generalizada y continua en España de manera que se pueda aliviar esta situación», ha concluido.