El mes de enero se despedirá con cielos luminosos, soleados, sin precipitaciones pero con frío y tras un nuevo descenso térmico el martes, los termómetros comenzarán a subir de manera gradual para que el mes de febrero llegue con algo más de confort térmico, según pronostica la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que no espera precipitaciones significativas.
La portavoz de la Aemet Beatriz Hervella señala que lo más significativo de esta semana volverá a ser el frío, concentrado especialmente en las temperaturas mínimas que seguirán muy bajas sobre todo los dos o tres primeros días y las escasas precipitaciones, que solo quedarán salpicadas por cierta inestabilidad en el Mediterráneo que aún permanece este lunes por el frío en altura y el embolsamiento y la inestabilidad que dejará inestabilidad en el Estrecho.
La portavoz subraya que el anticiclón sigue instalado en la Península junto con el pequeño embolsamiento de aire frío en altura, que da lugar a temperaturas mínimas muy bajas, con valores en Sabiñánigo (Huesca) de -12,3ºC o en el Puerto del Pico (Ávila) con -11,9ºC.
Este lunes, Hervella avisa por precipitaciones localmente fuertes que podrían caer incluso con aparato eléctrico, y por mala mar en Alborán y en Ampurdán. También espera intervalos nubosos en Baleares, mitad sur del área mediterránea, norte de las Islas Canarias de mayor relieve y Cantábrico Oriental, con algunas precipitaciones débiles en esas áreas.
Sin embargo, en el resto de España este será un lunes «luminoso, despejado y seco» en el que se notará un ascenso generalizado de las temperaturas máximas, aunque ninguna superará los 16ºC, excepto en el archipiélago canario.
El martes seguirán las heladas generalizadas a primeras horas en zonas de montaña y zonas llanas del interior peninsular, excepto en el Valle del Ebro y en el suroeste, pero serán algo menos intensas que las de este lunes. En cuanto a las heladas, la portavoz valora que son un fenómeno en disminución en un contexto de cambio climático.
Respecto a las temperaturas mínimas, destaca que descenderán ligeramente en el interior de la mitad sur pero subirán en el resto y especialmente será significativa la subida en el cuadrante nororiental de Cataluña.
Pese a la subida, Hervella señala que seguirán los avisos amarillos (riesgo) por mínimas «extremas» en prácticamente toda la mitad occidental de Castilla y León y en áreas puntuales de Madrid, Murcia, Castilla-La Mancha y Andalucía. También tendrá riesgo importante por mala mar Ibiza, áreas del Estrecho y en el Ampurdán, donde el viento soplará con fuerza.
El martes será soleado, con cielos azules y escasas nubes excepto en el Cantábrico oriental y el norte de las islas Canarias de mayor relieve. Las temperaturas máximas subirán de nuevo de manera generalizada y en casi todas las capitales de provincia se superarán los 10ºC excepto en buena parte de las de Castilla y León.
De cara al miércoles, cuando comenzará el mes de febrero, la portavoz de la Aemet pronostica una jornada tranquila, con muy pocos avisos de fenómenos adversos ya que solo seguirá el riesgo por costeros en el Ampurdán y algún aviso por mínimas bajas extremas en el noroeste, a pesar de la subida destacada que experimentarán precisamente en ese cuadrante de la Península.
Además, apunta que el miércoles las heladas serán más débiles sen el interior y seguirán siendo «especialmente significativas» en zonas altas. Las nubes y las precipitaciones débiles quedarán restringidas a la cornisa cantábrica y a la marina lucense, aunque esas nubes podrían adentrarse «un poquito más» a la mitad norte, aunque en términos generales confía en que la tónica general será el sol y los cielos despejados con temperaturas sin cambios o incluso con puntuales ascensos.
En Canarias no descarta precipitaciones en el norte de las islas de mayor relieve y pueden ser en forma de nieve en Tenerife a partir de 1.600 metros.
El resto de la semana seguirá marcada por el predominio del tiempo seco y soleado, sin lluvias y con un lento pero progresivo ascenso de las temperaturas que darán la bienvenida al mes de febrero con «cierto confort térmico».