El PSOE ha criticado al presidente del PP en Castilla-La Mancha, Paco Núñez, por darse ahora «golpes en el pecho» cuando fue «el primero» en pedir -incluso «a través de mociones» en el Ayuntamiento de Almansa- «la prohibición» de las macrogranjas en la región.
Así se ha pronunciado la eurodiputada y al portavoz del PSOE en la región, Cristina Maestre, quien ha afeado al PP de Castilla-La Mancha por poner «el foco» en polémicas «ajenas» a la región, en referencia al debate sobre la ganadería intensiva y las macrogranjas suscitado tras las palabras del ministro de Consumo, Alberto Garzón.
Maestre ha pedido «rigor y seriedad» al PP ya que, según ha afirmado, el Ayuntamiento de Almansa, con Núñez formando parte de él, aprobó una moción por «unanimidad» en la que se pedía prohibir «todo tipo de ganadería de macrogranjas en Castilla-La Mancha».
«Ahora se da golpes en el pecho y hace manifestaciones demagógicas cuando hace nada Núñez estaba portando una pancarta en contra de las macrogranjas en Castilla-La Mancha», ha lamentado la socialista.
Esto quiere decir, ha criticado, que «la inconsistencia del PP, una vez más, se pone de manifiesto con esta falta de coherencia y con esta falta de rigor en sus posicionamientos políticos» puesto que «cuando le ha interesado políticamente» se ha puesto «en la vanguardia de las reivindicaciones en contra las macrogranjas».
Según ha sentenciado, Castilla-La Mancha es «ajena» a estas polémicas, recordando que antes de que este debate saltara a la palestra el presidente regional, Emiliano García-Page, anunció una moratoria para paralizar todos los proyectos de instalación de macrogranjas en la región.
«Polarizar el debate entre ganadería extensiva y ganadería intensiva es desconocer por completo lo que pasa en Castilla-La Mancha», ha advertido Maestre, quien ha indicado que en la región el 95 por ciento de las explotaciones ganaderas son ganadería mixta.
Dicho esto, ha dejado claro que «cualquier polémica tendrá en frente al PSOE diciendo claro y rotundamente que apoyamos al sector primario». Frente a esto, el PP «cambia de opinión» y anuncia que no va a apoyar la moratoria del Gobierno regional, poniéndose -ha dicho- otra vez «la bandera de la demagogia» como está haciendo el PP a nivel nacional.